Concluye Emilio Márquez que Los éxitos del deporte demuestran que invertir en educación siempre es rentable. Las olimpiadas y el plan ADO sentaron las bases de una exitosa cultura del deporte pendiente de exportar a otros ámbitos sociales y económicos.
« La inversión en deporte realizada antes y durante el año 1992 da ahora sus frutos, casi dos décadas después, cuando el deporte español se encuentra en la élite del panorama internacional. Somos referentes en muchos campos que jugamos en el interior del país e influyentes en otros muchos que teóricamente no son tan comunes. Vivimos una época dorada del deporte español, que por primera vez en su historia ve confluir títulos de diferentes ramas.»