Siempre me han parecido irreales y complicadísimos los horarios en España. Hay que tener en cuenta demasiados factores que conducen más que a una flexibilidad, a una rigidez que nos afecta a todos de manera negativa. Salvador Cardús i Ros: “El malestar creciente por las tensiones horarias es el resultado de un proceso de desorganización que ha llevado al límite de la resistencia a muchos ciudadanos y ciudadanas.”
Contra el malestar horario.