Un domingo de 1958 apareció un coche encaramado al tejado de una biblioteca de la universidad de Cambridge, La gran broma universitaria de todos los tiempos. ¿Se imaginan hoy ese tremendo esfuerzo de ingenio y trabajo? Pues Josete nos explica cómo llevaran a cabo la hazaña.
«En una cena de aniversario del grupo de estudiantes de ingeniería, se reunieron para revelar sus identidades y explicar como el Austin Seven había sido izado a lo alto de la universidad de Cambridge. El cabecilla, Peter Davey reveló que había ideado el plan durante su estancia en las habitaciones de la zona Gonville and Caius con vistas a la azotea.
Peter y 11 estudiantes formaron el equipo de la gran broma universitaria….Divididos en varios grupos, el primer grupo de arrastre desplazó el Austin Seven por Cambridge hasta el aparcamiento cercano a la biblioteca Seely, alegando a los inoportunos que encontraban en su camino, que iba a ser utilizado para pegar carteles de publicidad de noticias universitarias.
Peter Davey, que ahora tiene 74 años eligió la semana final de mayo, cuando la actividad de transeúntes es casi nula, una semana perfecta para realizar todo tipo de golpes con toda tranquilidad. Así que durante la tranquila semana, el segundo grupo se dedicó a alzar una rudimentaria grúa construida a partir de andamios postes y cables de acero sobre el empinado techo de pizarra.
Un tercer grupo pasó una tabla que ayudó a la elevación, a través de una brecha situada entre el techo y una torrecilla de la ventana Caius, conocida como el Salto del Senado… Como equipo de transbordo, tres tipos de cuerdas, ganchos y poleas.»