Menos mal que en este país es tan difícil que se pongan de acuerdo; con un poco de suerte, lo del copago en la sanidad se queda en agua de borrajas (claro, que a lo mejor están ustedes de acuerdo): ¿Y si el ambulatorio le cobra para que no vaya?.
«La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, admitió recientemente que lo ha manejado en el paquete de medidas para ahorrar. Según Sanidad, un pago de 5 euros por visita médica y 10 por urgencias, excluidos crónicos y pensiones mínimas, recaudaría 600 millones de euros al año. Pero por ahora, proclama el secretario general de Sanidad, José Olmos, el copago constituye una línea roja que el Gobierno no está dispuesto a cruzar.
La consejera de Salud catalana, Marina Geli, y el portavoz de Convergència i Unió en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, apostaron por plantear su aplicación antes del último Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Los copagos tienen una función recaudatoria, son una modalidad de ingresos para sufragar la financiación de medicinas, pruebas diagnósticas o médicos especialistas, pero actúan sobre todo como elemento disuasorio y moderador de la demanda, es decir, reduciendo la frecuencia en la asistencia primaria, que en España es un 40% superior a la media de los Quince. En este caso pueden implantarse tasas fijas —un euro por visita en Francia— o variables, según la renta. “De aplicarse tendría que ser un sistema sencillo, por ejemplo con la tarjeta sanitaria, pero hay que estar alerta, a ver si toda la parafernalia que se monta cuesta al final más de lo que se pretende recaudar, porque en este país somos capaces de eso y mucho más”, avisa Manel Peiró, vicedecano de la escuela de negocios Esade.»
2010-06-09 14:43
Me ha encantado este detalle: “De aplicarse tendría que ser un sistema sencillo, por ejemplo con la tarjeta sanitaria, pero hay que estar alerta, a ver si toda la parafernalia que se monta cuesta al final más de lo que se pretende recaudar, porque en este país somos capaces de eso y mucho más”, avisa Manel Peiró”.
A ver lo que tarda Esperanza Aguirre en coger las peores ideas de este sistema para degradar más aún la sanidad pública.
2010-06-09 15:03
Pues yo estoy a favor del copago. Ojalá lo implanten y cuanto antes. No sé en otros sitios cómo será, pero mi ambulatorio está siempre lleno de gente (jubiletas, mayormente) consultando toda clase de patologías imaginarias al médico de familia el cual, para quitárselos de encima, les envía a hacerse miles y miles de análisis de sangre, orina y cualquier otro fluido analizable. Hazles pagar UN EURO por la consulta y ya verás: ambulatorios desiertos.
¿Que la vida del jubileta es muy triste? La mía más. Y me aguanto. Que paseen por la calle, que es gratis y sano.
Al final, esto de la medicina pública es como todo: los sistemas teóricos funcionan a la perfección mientras no se meta gente por medio; en cuanto se mete, la cagamos.
2010-06-09 16:12
Antes de plantear el tema del copago, en mi opinión, hay otros asuntos que resolver.
El tópico de los jubilados ocupando espacio y consumiendo recursos es eso, un tópico. Hace años que se viene reclamando por parte de los profesionales una atención especifica para las personas mayores, se llama geriatría. Una especialidad que apenas cuenta con profesionales y recursos. (Tanto en centros específicos como médicos y enfermería)
Otro asunto es la atención a enfermos crónicos (mayoritarios los ‘jubiletas’), un sistema que les libere de los peregrinajes burocráticos, la excesiva polimedicación, los inexistentes programas de formación y rehabilitación, etc.
Los médicos de familia dedican mucho tiempo a tareas burocráticas (bajas, recetas, certificados, volantes, etc.). Leer este artículo en el Pais: No quiero ser médico de familia
Si se acepta el copago se va interiorizando el concepto de “pagar por salud” cosa que viene muy bien al sector privado y erosiona el sistema público de salud gratuito y universal.
El tema del copago es una mera cortina de humo para enmascarar otros problemas mucho más graves.
2010-06-09 18:47
Me encanta tu estilo semiparanoide: “El tema del copago es una mera cortina de humo para enmascarar otros problemas mucho más graves”. En serio, Caye, yo soy muy fan de tu prosa :-)
Pero lo de que los jubiletas son un tópico, será en tu ambulatorio. El mío está lleno de viejales dando el coñazo todo el santo día. Que paguen. O se que queden en casa con sus cientos de males imaginarios.
La sanidá (que es cosa seria como tú y yo, por desgracia, bien sabemos) gratuita y para el que la necesita.
2010-06-09 19:19
Alber, desde que tengo relaciones intensivas con profesionales de la cosa (como enfermo crónico y “activista a tiempo parcial”) me voy enterando de muchas cosas. No es que lo diga yo, sino que lo he oido en varias ocasiones a profesionales de la saud, el tema del copago es una especie de mantra para que nos vayamos habituando … igual que el tema de presentar al “usuario” una factura con lo que cuesta el servicio prestado. Para “concienciar” y así pasar de ser usuario con derechos a “cliente” con sentimiento de culpa por utilizar un servicio público.
En mi ambulatorio no hay, no veo, saturación. Pero es un caso especial, pues atiende solo a 300 “clientes”. No digo yo que muchos mayores tengan males imaginarios (duelen igual que los verdaderos) pero, objetivamente, la saturación viene dada porque los médicos de atención primaria dedican más tiempo a tareas burocráticas que a tratar o evaluar la enfermedad.
Termino, para desatascar el sistema sanitario Osakidetza diseñó un programa para cambiar el modelo de atención a los enfermos crónicos que se llevan el 70 % de los recursos del sistema. Lo bueno (o malo) es que llevan desde el año 2003 con evaluaciones, modelos teóricos, estudios previos, etc. pero todavía no han hecho nada práctico. Solo anuncios en prensa de programas que nunca terminan de cuajar y que se llevan una pasta gansa.
Ahora bien no voy a negarte que, un pago simbólico por servicio recibido, tendría un efecto disuasorio en más de un jubilado. Así se demostró cuando empezaron a cobrar una pequeña cantidad a los jubilados por utilizar el transporte público. La verdad es que se acabó el ver los trenes llenos de jubilados que iban de un lado para otro con el único propósito de pasar la tarde o la mañana.
Pero hablamos de sanidad y para mayores de 65 años no hay especialistas (geriatras). Y ya de paso decir (esto ya lo saben muchos padres) que escasean los pediatras que son sustituidos “temporalmente” por médicos de familia.
Y disculpas por el rollo, pero el tema me interesa ;-)
Salu2
2010-06-09 21:48
Ahora bien no voy a negarte que, un pago simbólico por servicio recibido, tendría un efecto disuasorio en más de un jubilado. Así se demostró cuando empezaron a cobrar una pequeña cantidad a los jubilados por utilizar el transporte público.
Exacto. Iba a ponerte este mismo ejemplo. Yo uso mucho el tren Hedaya-San Sebastián y siempre estaba petado de jubiletas que hacían el recorrido para mirar por la ventanilla y charlar con los colegas. El horror. Y no te creas tú que cedían el asiento a la gente que venía deslomada de currar, no…
Pasaron de la gratuidad al copago (sigue siendo poco más que simbólico para ellos) y se acabaron las hordas de jubilaos. Ya no están, simplemente, y el tren lo usa la gente que lo necesita de verdad.
Y luego viene el qué es ser jubileta hoy en día: porque yo veo a mi viejo, con su pensión de maharajá, y me troncho cuando a él las recetas le salen por la patilla y yo las tengo que apoquinar religiosamente…
2010-06-10 12:23
Yo no creo que el copago en la sanidad sea una buena idea hoy por hoy. Prefiero ahorrar, por ejemplo, quitando las televisiones públicas, que no creo necesarias: ya está la radio, se puede poner tv en internet… (ya, ya sé que no tiene que ver; pero sí, porque esto ha surgido para recaudar, para sacar dinero en tiempos de crisis y con una deuda externa del copón).
Donde yo vivo, Alber, Cayetano, los jubilados o jubiletas sí salen a pasear y van a los centros de mayores. La verdad es que al médico van algunos cuantos :-), pero es porque suelen tener enfermedades crónicas. De hecho, no sé si lo habéis notado, pero convencer a tu madre o a tu tía (jubiletas, vaya) para que vaya al médico es tarea ímproba; odian los médicos y las revisiones y no hay manera.
En lo que respecta a la jubilación que cobran algunos, muy alta, si además tiene fondo blindado con la empresa (ni eso ni la pensión creo que nos lleguen a nosotros :-( ) normalmente van a seguro privado y no a la sanidad pública.
A mí, las cifras de que se habla —5 euros visita al ambulatorio, 10 euros a urgencias— no me parecen simbólicas. Enfermo y clase media (porque digo yo que excluirán a las rentas más bajas): cornudo y apaleao.
Además, yo ya estoy un poco hasta las narices: a los jubilados, vamos a quitárnoslos del transporte público, de los ambulatorios, de todas partes donde se meten; haberlo pensado antes de hacer que la gente viva tanto, si no sabes qué hacer con ella. A esta sociedad le sobran viejos y los tira; pero cuidadito con tocar a los grandes empresarios y a las rentas altas, que se nos van los pobrecitos con un disgusto tremendo a un país del tercer mundo a explotar gente y ganar más. Pues no, a tocar a los intocables. A defender los derechos del estado de bienestar que aún nos quedan (que cada día son menos).
Bueno, ya me he liao. Lo siento.
Padawan, a mí también me ha parecido casi entrañable lo de que «en este país somos capaces de eso y mucho más» ;-)
Alber, me encanta tu frase «los sistemas teóricos funcionan a la perfección mientras no se meta gente por medio; en cuanto se mete, la cagamos» ;-) Es una de las claves para entender la política; y que debería ser obligatoriamente aprendida por más de un político.
Perdón por el rollo.
Un beso.
2010-06-10 12:57
Ana tampoco yo lo creo.
Si creo, o vaticino, que de aquí a tres años el copago constituye la línea roja que los gobiernos van a cruzar Por mucho que digan en sentido contrario Trinidad Jiménez o José Olmos.
Decia que esto del copago es una cortina de humo, pero tambien un síntoma entre otros muchos de que va ganando adeptos la idea de destrozar el sistema sanitario gratuito y universal.
Esa mentalidad del norteamericano que argumenta: No quiero que con mis impuestos se financien servicios a los outsiders. O dicho de otra forma, dejar morir de inanición o enfermedad a los perdedores, los inútiles y enfermos. Ellos son los culpables de su desgracia. etc.
Por cierto una entrada relacionada con el tema Pirulas sanitarias