Oh, Israel
Oh, Israel, un punto de vista distinto del asunto israelí, sin dejar de lamentar el asesinato de los 9 componentes de la flotilla, pero tratando de entender la encrucijada del estado judío. Por Joselu.
«Mucho me temo que esta es la verdadera clave. Si te odian, mejor será que te teman también. Tras el padecimiento espantoso del holocausto, algunos reprocharon a los judíos haber sido mansos y haberse dejado llevar sin oponer resistencia a las cámaras de gas. Y digámoslo claro, en Europa existía –y sigue existiendo- un profundo y arraigado sentimiento antijudío o antisemita, como quieran llamarlo. La mayor parte de los países en que se extendió la contienda mundial colaboraron activamente en detener y deportar judíos a los campos de exterminio, y el Vaticano no hizo lo suficiente para defender al pueblo culpable del deicidio. Los judíos saben que no pueden esperar demasiado de Europa. Tienen una buena experiencia de ello. Millones creían ser ciudadanos alemanes, austriacos, franceses, holandeses, húngaros, italianos… pero todos se convirtieron en alimañas judías a exterminar. Siempre se han extendido bulos sobre ellos: que si asaban a niños cristianos para comérselos, que si extendían epidemias con sus conjuros, que eran avaros de nariz ganchuda, que si dominan la banca mundial, que son los verdaderos gobernantes de Estados Unidos, que son malvados, genocidas, peor que los nazis –-sus verdaderos maestros—.»
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2010-06-04 21:42
El victimismo es tan malo que Joselu cae en la xenofobia directa en sus opiniones sobre los europeos, culpables todos del holocausto y, por lo que se ve, tan culpables que la culpabilidad la heredan los hijos, los nietos, los bisnietos, etc., y encima sirve para justificar los actos del Gobierno israelí. Muy bonito.
Quizás lo entendería mejor si se diera cuenta de que su forma de pensar es la misma que se encuentra en todo el mundo árabe. Confunde la religión y el Estado. Concede al Estado de Israel la representación de todos los judíos (muy equivocadamente) y convierte un problema político en un problema étnico. Igual que Irán y los de Hamas. Pues nada, que elijan bando… y a matarse alegremente si quieren.
2010-06-05 00:27
Carlos, intento entrar en el inconsciente del mundo de Israel. No justifico sus actos, intento comprenderlos leyendo a figuras intelectuales como Amos Oz o David Grossman que están por el entendimiento con los árabes, por el fin del bloqueo de Gaza y por la creación de un estado palestino. Creo que nadie puede intentar la paz si no entra en la mente --con sus miedos, con sus trampas-- de los contendientes. Me fascina la historia del pueblo judío. Creo que es un pueblo singular y especialmente valioso culturalmente. Nadie entiende la historia de nuestra civilización sin el aporte judío. Lo llevamos dentro de nuestra forma de ser y de pensar.
¿El estado de Israel? A estas alturas es difícil o imposible dar marcha atrás. Es irreversible por el momento. Dices que convierto en un problema étnico lo que es un problema político. Interesante punto de vista. ¿Cómo lo resolverías tú en tal caso prescindiendo de la cuestión cultural o étnica? ¿Tienes alguna luz sobre el asunto? Yo no. En mi post venía a sostener que el motor del estado judío es el miedo a desaparecer. ¿Te parece absurdo?
Sé que hay muchos judíos que no se sienten representados por el estado de Israel, que hay judíos antisionistas. Pero dudo mucho que haya ningún judío al que le sea indiferente el destino de dicho estado, o que le sea absolutamente igual si es aplastado y sus habitantes exterminados, que es el miedo que sienten en su fuero interno. Y motivos no les faltan para pensarlo.
¿Problema político? ¿Cómo afrontarlo?
Un saludo.