Josu Mezo escribe sobre un dato sorprendente: en la misa encuesta una pregunta cambio sus resultados de una manera muy significativo dependiendo de si el enunciado pregunta por “gays y lesbianas” o por “homsexuales”, lo que sirve para que relativicemos aún más las encuestas: ¿«Homosexuales» o «gays y lesbianas»?.
«Resultado: el 70% está a favor de permitir que sirvan en el ejército los gays y lesbianas, pero sólo el 59% está a favor de que lo hagan los homosexuales. Es más, preguntados por su reacción en caso de que hagan pública su orientación sexual, seguía estando a favor de su reclutamiento un 58% de los preguntados por gays y lesbianas, pero sólo un 44% de los preguntados por los homosexuales (según cuenta Lakoff, la diferencia en este último punto es particularmente alta entre los demócratas, que responden a favor, en el primer caso, el 79% de las veces, pero sólo el 43% en el segundo caso).
Ya ven: diferencias de 11, 14 puntos, ó de 36 puntos (para los demócratas) según se pregunte, en distintas preguntas, por “gays y lesbianas” o por “homosexuales”. Cualquiera de las dos formulaciones podría haber sido escogida por un investigador perfectamente neutral y deseoso de hacer un estudio serio y objetivo, sin agendas oscuras ni planes turbios. Pero los resultados difieren, a veces espectacularmente.»