Las acusaciones de plagio están a la orden del día. Siempre hay alguien que ve parecidos entre una serie o una película y piensa “¡pero si es igual que mi microrrelato!”. Es lo que ha sucedido ahora con la serie La Señora, que ha sufrido una acusación de plagio que en cuanto se lee, se cae de puro endeble. Lo cuenta El Pianista. La señora y el parasito. Biología del plagio
«1. Lo que registra Pérez-Alonso no es una novela, sino un resumen del argumento. La difusión que le da es mínima: lo remite a Ediciones B (que posteriormente rechazaría la novela) y lo inscribe en el Registro.
2. La serie entra en producción en 2007, lo que supone un trabajo previo de muchos meses: desde que se redacta una idea inicial, hasta la posterior confección de una biblia, después los primeros guiones, etc. Naturalmente, eso no lo sabe ni la Barbie Justiciera, ni los justicieros de la Fiscalía. Ni se molestan en preguntar. Pero, mes arriba mes abajo, puede calcularse que Virginia Yagüe empieza a escribir la serie más o menos a principios de 2006.»