Juro que lo intento, que le busco siempre el lado positivo, que intento verlo desde otros ángulos y vertientes, que lucho por entusiasmarme con alguna de sus formas, que aplico la linterna a sus oscuridades… pero no hay modo: no me gusta la literatura de la ilustración española. Sin embargo, sí me divertí con los pasajes que se pretenden mantener ocultos y que sin duda son de lo mejorcito del siglo XVIII: su literatura erótica. Si a ustedes les parece ñoño, aburrido y pueril El sí de las niñas, léanse el Arte de putear de Moratín padre. En fin, que pareciese que la erótica fuese una vía de escape para el talento entre tanta mediocridad:
La literatura erótica de la ilustración española, de
Victoria Galván González.
2002-11-14 01:44 Tu mamá reconchetumadre