Sam Pizzigat desglosa cómo afecta la subida de impuestos que Obama quiere aplicar a los más ricos en Estados Unidos, y aclara que esa subida la que les pone como gato panza arriba: Lo que cuesta subir los impuestos a los ricos.
«Otra ventaja de la que se aprovechan y disfrutan los ricos: según la legislación vigente, la IRS (Servicios de Impuestos Internos por sus siglas en inglés) tan sólo cuenta con el beneplácito de 3 años para averiguar si sus contribuyentes acaudalados omiten en su declaración información referente a aquellos beneficios por activos en el extranjero. Pasados los tres años el IRS ya no tendrá autoridad para sancionar a estas grandes fortunas que evaden impuestos. El presupuesto de Obama propone que se extienda este estatuto de limitaciones hasta los seis años.
Mientras, bajo el presupuesto financiero de Obama, las ganancias de las rentas más altas se verán afectadas con un aumento de las contribuciones impositivas. En el año fiscal 2011, a las parejas con ingresos superiores a los 250.000 dólares y a los individuos con rendimientos por encima de los 200.000 dólares se les aplicará una tasa de retención del 39,6 por ciento de los beneficios ordinarios sobre los primeros 373.650 dólares.
Estos contribuyentes, bajo el plan Obama, tendrán además que pagar más impuestos sobre los dividendos y “ganancias de capital” por la venta de capital social y otros activos. La actual tasa impositiva del 15 por ciento para esta corriente de ingresos ascendería al 20 por ciento.»