Como ya sabrán el gobierno de G. Bush acaba de obtener la carta de libertad para hacer lo que se le venga en gana; concreto: ya hacía lo que se le venía en gana, pero ahora lo hará sin riesgo de varapalo electoral, al menos inmediato. Iba a decir “que tiemble el mundo no occidental”, pero ¿hasta qué punto la política internacional de Estados Unidos no supone una amenaza al menos indirecta para sus propios aliados? Y otra cosita que me hace temblar: la que está considerada como la democracia más consolidada del mundo los gobiernos y las cámaras de representantes se forman con el voto ¡del 35% de la población!
La guerra tiene la palabra, de
José F. Cornejo.