Parece que los políticos españoles no acaban de enterarse de la revolución que están viviendo. Mientras continúa la amenaza de recorte de libertades civiles, José María Lasalle, en representación del PP, incide en los mismos tópicos a favor de las industrias de contenidos, lo que demuestrea que un buen lobby debe tener huevos en varios cestos. Enrique Dans comenta las declaraciones del secretario nacional de Cultura y diputado por el Partido Popular en Jose María Lassalle se equivoca.
«Con profunda decepción, porque José María Lassalle fue uno de los asistentes a aquella reunión celebrada al hilo del manifiesto, porque ocupa un cargo de influencia en el partido, y porque no expone su postura a título personal, sino aparentemente como postura de su partido. Y porque con su postura demuestra tener la cabeza blindada a la entrada de toda idea nueva, enrocada en una concepción de propiedad intelectual absolutamente absurda en los tiempos que corren, y lo peor, llena de ideas perversas sobre “robos”, “piratas” y fantasmas por el estilo con los que, decididamente, no vamos a ningún lado. Este tipo de ideas no son las que España necesita, no representan ningún cambio con respecto a lo que hay, y no se convierten en esperanza de nada. Son, simplemente, más de la misma estupidez.»
2009-12-31 11:03
Pues a mí el artículo de Lassalle me parece muy acertado y muy razonable. Pide, al gobierno, cosas tan sensatas como éstas:
“Que impulse una regulación de los derechos de autor que, al mismo tiempo, sea capaz de proteger efectivamente a las industrias de contenidos; de abaratar el ADSL; de favorecer decididamente los nuevos modelos de negocio en la Red y, finalmente, de fijar un marco de garantías legales y judiciales que permita a los usuarios de Internet sentirse protegidos en sus derechos”.
Yo estoy de acuerdo con eso. El ultraliberalismo de Enrique Dans es lo que no me convence nada de nada. Y, sinceramente, no creo que la SGAE sea un lobby tan poderoso que tenga controlados, al mismo tiempo, al PSOE y al PP. Eso no se lo cree nadie. ¿Y si es que, a lo mejor, ellos piensan así por su propia cuenta?