“Las feministas podemos crear un estado de opinión para que a las mujeres afganas les sea permitido quitarse la burka o volver a la escuela, pero somos impotentes ante una declaración de guerra. Podemos lanzar una campaña eficaz contra la ablación del clítoris en ciertas regiones, pero nada podemos hacer para modificar las exigencias de los créditos estructurales que hunden en la miseria a esos mismos países”. Y ésto, según
Victoria Sendón de León, significa que la quiebra general de pensamiento político afecta también al feminismo, que tendrá que replantear sus posiciones ante una nueva era, en la que faltan perspectivas para que se de el necesario cambio de paradigma cultural.
La quiebra del feminismo