Para los que aún se resisten a creer que un ex-presidente de los Estados Unidos pueda obtener el Premio Nobel de la Paz:
Olivo de paz, de
Sergio Ramírez: ” Lejos de encerrarse en el mausoleo que se le construye a cada ex presidente de los Estados Unidos en su estado natal, supo convertir desde el principio al Centro Carter en Atlanta en un polo de solución de conflictos internacionales, de vigilancia de los procesos electorales y del respeto a los derechos humanos, todo lo cual tiene que ver con la paz.”