Ignacio Echevarría cree que Onetti es uno de esos pocos escritores de los que se puede recomendar su obra completa, pues, dice, apenas hay altibajos y el nivel es constantemente alto: Todo Onetti.
«No es una simple cuestión de calidad, o no solamente. Hay escritores muy valiosos de los que la sola idea de tener que leerlos enteramente resulta abrumadora. No es el caso de Onetti, cuya obra, lenta y relativamente escasa, cabe toda, muy holgadamente, en tres volúmenes, ni siquiera demasiado gruesos. El recorrido íntegro de esos tres volúmenes alcanza enseguida una altura sorprendente, y apenas ofrece altibajos. La obra de Onetti es como un altiplano: una vez acostumbrado a esa altura, hecha su respiración a su atmósfera, el lector transita por ella sin esfuerzo. Lo que tiene por delante no es tanto una ruta como un paisaje, y éste se le hace pronto familiar, como pronto lo serán, asimismo, sus habitantes.»