Marco Rascón escribe que en México el presente no existe, sólo existe un futurillo más o menos próximo que es el 2006, año de las próximas elecciones. “Es tanta la mediocridad que no hay agenda nacional, pues el poder controla toda la información, fundamentalmente el tiempo, interviniendo en la “agenda” de todos los políticos y los ciudadanos. Al no existir control del tiempo ni agenda nacional, el presente es un vacío en crisis.”
La crisis del tiempo.