Carlos Burges escribe sobre cómo la burocracia es un lastre para los desarrolladores y pone varios ejemplos históricos de proyectos exitosos gracias a la renuncia a esa lacra: La mentalidad burocrática es la única constante del universo.
«Se eliminaron prácticamente todas las normas, dejando en manos de los ingenieros el trabajo creativo para solucionar todos los problemas y en último término Kelly Johnson tomaba las decisiones oportunas cuando se llegaba a un punto sin retorno en un problema en el que los ingenieros requerían del jefe de proyecto.
Adelantándose a las exigencias de la USAAF, el prototipo XP-80, pintado en verde espinaca y bautizado Lulu-Belle, estuvo dispuesto para su primer vuelo sólo 143 días después de comenzado el proyecto. Estaba propulsado por un turborreactor británico Halford H.B1 de 1.360 kg de empuje, y el 8 de enero de 1.944 con Milo Burcham a los mandos, se elevó por primera vez del suelo, pero los segundo y tercer prototipos XP-80A, así como el YP-80A de preserie estuvieron dotados con el General Electric I-40 de 2.980 kg de empuje.»