Álvaro Ibáñez denuncia los teletimos sin control, un negocio de estafadores con la connivencia de empresas de telecomunicaciones y medios de comunicación en la que todos tienen su trozo de pastel.
«El problema se antoja el de siempre: que aunque el fraude sea monumental cuando se «roba» a muchas personas distintas cantidades muy pequeñas apena se nota (recordemos: el «redondeo» de las cabinas telefónicas, los dialers también vinculados a números de tarificación adicional, concursos por SMS, suscripciones engañosas a servicios «SMS premium», etc) mientras que si un tipo se llevara esas mismas cantidades en sacas del Banco de España lo perseguirían hasta con helicópteros.»
2008-12-26 12:27
No quiero señalar a nadie pero varias cadenas financiadas con dinero público emiten este tipo de programas. El asunto del “robo” vía SMS es común a todas las cadenas.
Por otro lado, en mi opinión, estoy de acuerdo como apunta el artículo, es más un asunto (no se si problema) sociológico.
El número de estúpidos aumenta en forma exponencial y siempre hay gente que no duerme por las noches ideando maneras de separar a la gente de su dinero.
Un saludo