Los tópicos con que se describen los países suelen ser concepciones que unas culturas se hacen de otras para defenderse de sus propias carencias: “Alemania tiene fama de ser país triste, conservador, hosco, lento, cosa que tiene poco que ver con la realidad. Una caricatura fruto esencialmente de la envidia, el modo que tienen de consolarse sociedades atrasadas, perezosas, obsoletas, faltas de sentido autocrítico, como la sociedad española.” Esto lo escribe
Suso de Toro, que inicia con esa declaración un elogio de un país que según él alberga el germen de la resistencia contra la bushbalización del planeta.
El camino alemán.