Paul Krugman elogia la respuesta británica a la crisis económica (inyectar dinero público a los bancos) frente a la parsimonia estadounidense: Gordon hace el bien.
«¿Cuál es la naturaleza de la crisis? Los detalles pueden ser insensatamente complejos, pero lo fundamental es bastante simple. Cuando reventó la burbuja de la vivienda, se generaron grandes pérdidas para todos los que compraron activos respaldados con pagos hipotecarios; estas pérdidas han dejado a muchas instituciones financieras con demasiadas deudas y muy poco capital para otorgar créditos que necesita la economía; las instituciones financieras en problemas han tratado de cumplir con sus deudas e incrementar su capital vendiendo activos, pero esto ha provocado que bajen sus precios reduciendo su capital aún más.
¿Qué se puede hacer para contener la crisis? La ayuda a los propietarios de casas, aun cuando deseable, no puede prevenir grandes pérdidas sobre los préstamos de mala calidad, y, en cualquier caso, su efecto será demasiado lento como para ayudar en el pánico actual. Entonces, lo natural que hay que hacer –y la solución adoptada en muchas crisis financieras anteriores– es resolver el problema del capital financiero inadecuado, haciendo que los gobiernos proporcionen más capital a las instituciones financieras a cambio de una parte de la propiedad.»