Settembrini anuncia que deja su bitácora; una pena. Pero además de las razones por las que clausura ese espacio, nos deja de regala una lista clasificada de sus artículos, muchos de ellos relacionados con el mundo del libro, y casi siempre muy interesantes: E la nave va….
«El resultado ha sido una secuencia caótica y deslavazada de citas y fragmentos robados, que ojalá haya servido a algún visitante para conocer a esos autores más o menos ignorados por las listas de ventas. Poco más. Un blog, en fin, perfectamente prescindible, sobre todo en un entorno en el que empieza a consolidarse el blog como un género en sí mismo y una herramienta literaria digna de consideración. Algunos medios, como El país, comienzan a acoger blogs en su regazo, y algún escritor de los grandes (Vila-Matas, en fin) ha puesto sus ojos en este mundillo. Con blogs como El lamento de Portoy o La senda de los libros empieza esto a dejar de ser el juguete para navegantes ociosos que fue (al menos para los que carecemos de talento), y se convierte en un fenómeno digno de atención.»