Las primeras noticias del accidente de Barajas llegaron de manos del Twitter de Alvy, uno de los tres componentes de Microsiervos. A él le había avisado su compañero Nacho, practicante del “planespotting”, una afición que consiste sencillamente en fotografiar aeronaves. Lo cuenta Delia Rodríguez. Los ‘cazadores de aviones’, los primeros en informar.
«En un país en el que existen ya más de cincuenta millones de móviles (la mayoría con cámara) y muchos nunca se separan de su equipo fotográfico tampoco es extraño el caso de Enrique Piris. Taxista, suele trabajar en la cola del aeropuerto madrileño, y siempre lleva su réflex en el coche. Ayer estaba a punto de recoger pasajeros pero al ver el humo abandonó la fila de la T4 y buscó un lugar desde donde poder fotografiar mejor los hechos. Sus imágenes de la operación de emergencia, tomadas hasta que la batería de la cámara se agotó y que compartió en cuanto pudo en Flickr, son similares a muchas de las que se han podido ver en la prensa.»