El ex atleta José Luis González hace una reflexión crítica y dura sobre el (pobre) resultado del atletismo español en los Juegos Olímpicos, apuntando directamente a la labor del presidente de la federación, José María Odriozola. Odriozola bajo cero.
«Federación intervencionista.
El ente que preside Odriozola está montado como un negocio. Con pocos atletas cualificados para intervenir en la Golden League, desde España se desalienta a la clase media a tomar parte en mítines de inferior nivel que se disputan fuera de nuestras fronteras, reuniones muy dignas. Se acomoda al atleta: propuestas de reuniones, todas ellas bajo el paraguas de la federación, a un par de horas de su lugar de residencia, con sparrings de medio pelo ante los que tal vez pueda permitirse levantar los brazos cuando cruce la línea de meta.
Atletas acomodados.
Con su beca, su patrocionador y pruebas a su medida, el atleta no crece, se aburguesa, se limita: no sabe competir. Los efectos alcanzan incluso a gente de mayor altura. Higuero y Casado, por poner dos ejemplos, llevan demasiado tiempo cargados de complejos en los grandes escenarios, quedándose atrás en los primeros 1.200 metros, intimidados por el nombre de sus adversarios. »