Antoni Gutiérrez-Rubí analiza la relación entre la Generación Y (la que ahora comienza a incorporarse al trabajo, y la primera crecida con entre ordenadores y teléfonos móviles) y la crisis financiera, cómo pueden influir y cómo las empresas han de acercarse a ellos: La crisis y la Generación Y.
«Recientemente, los ministros de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), reunidos en Corea del Sur, han firmado la Declaración de Seúl donde se afirma, sin titubeos, que la economía de Internet ofrecerá nuevas oportunidades de empleo e impulsará la productividad de un sistema económico agotado y que muestra síntomas de colapso. Los miembros de la Generación Y son los nativos digitales de una nueva economía del conocimiento y de la comunicación que desbordará y superará la vieja —y en crisis— economía analógica, industrial y del carbono.»