Marian Hens cuenta la historia de los vecinos de Jánovas, quienes fueron expulsados de su pueblo desde la década de los sesenta hasta 1984, para construir un pantano. Ahora, en 2008, Fomento ha confirmado que ese pantano no se hará y ha permitido que los vecinos vuelvan a sus viejas casas, pagando intereses, eso sí. Regresar a un pueblo fantasma por un pantano que nunca fue.
«La historia del frustrado pantano de Jánovas se remonta a 1951 cuando la hidroeléctrica Iberduero recibió del Estado la concesión para aprovechar varios saltos de agua, entre ellos el de Jánovas en el río Ara. La empresa nunca concretó la construcción del proyecto hidroeléctrico, pero entre 1963 y 1965 la mayoría de los residentes se vieron empujados a un éxodo forzoso, unos porque expropiaron sus patrimonios, otros porque fueron presionados para vender.
Los últimos en marcharse fueron Emilio Garcés y su mujer, Francisca, que resistieron continuas amenazas durante dos décadas. A los 85 años, ambos se sienten muy mayores para sobrevivir a otra mudanza, pero su hijo Antonio no duda de que intentará volver a habitar el hogar de su infancia. “Es mi pueblo, me echaron injustamente de él y no veo por qué tengo que vivir en otra parte”, afirma.»
2008-08-13 11:00
Marian Hens, destacada periodista británica