Voz de árbol (sic) estuvo ayer en el concierto de Tom Waits en Barcelona sabiendo lateralmente quién es y sin ser un conocedor real de su música. Entre tanta veneración crítica me ha encantado esta visión poética completamente limpia de alguien que ha descubierto a un músico inverosímil por primera vez. ¿Quién es Tom Waits?.
«Tom Waits es un predicador borracho y un demonio. Tiene voz de fiera salvaje y se mueve como un demente. Su garganta tiene dieciocho millones de estratos y su voz está llena de grietas, resquicios y recovecos.
El lunes me pasó por encima la apisonadora de Tom. Sus estrofas eran como latigazos en mi alma. Su siseos de serpiente, su mirada hipnótica de ofidio, en fin más bestial que humano levantando polvaredas con los pisotones de sus enormes botas viejas.
Entre gruñidos le oí decir que se iba a sentar a la mesa con una cuchara en la mano y el mundo en el plato. ¿No será Tom la encarnación del eterno adversario? Moviéndose por el escenario con pasos de momia, de Frankenstein desencadenado, bailaba como un sátiro deforme y ebrio.»