¿Es el chino la próxima panlengua? Vicente Huici cree que sí, pero no tanto en el sentido comercial-comunicativo como en el de lengua de cultura: como el francés en el XIX o el alemán en el XX, saber chino podría abrirnos las puertas a una cultura desconocida llena de posibles respuestas. Chino, ¿una lengua de futuro?.
«Cuenta Octavio Paz que en una ocasión Ortega y Gasset le sugirió que debía aprender el alemán y dedicarse a la filosofía. Hoy, probablemente, Ortega – que era un hombre avispado- le hubiera dicho que aprendiera mandarín. En cualquier caso, el aprendizaje del chino como acceso de cultura más allá de cómo lengua de relación, no debería contemplarse como una “chinoisserie” que pudiera empalmarse con otras tantas más. Es decir, no como algo exótico ni, mucho menos, como vehículo de lo que de alternativo, complementario o salvífico pudiera tener la cultura china en su conjunto. Más bien, como dice François Jullien en su libro “La China da que pensar “(Barcelona, 2005), el interés cultural puede residir, entre otros aspectos, en observar sobre qué cuestiones se ha reflexionado en el pensamiento chino y qué soluciones se han dado.»