Adolfo Ramírez Corona reflexiona sobre cómo sería la novela de un filósofo y sobre por qué ensayo y narración están tan separados. Quizás, digo yo, es que el problema de los filósofos para pisar tierra es precisamente su incapacidad para la narrativa. O a lo mejor es al revés. Qué sé yo.
La novela del filósofo: “No lo sé de cierto, pero supongo que hay algo en la cabeza del filósofo que no lo hace muy apto para narrar. Y sin embargo a veces parece que todos los filósofos traen una novela dentro de sí mismos.”