Antonio Martínez Sarrión es entrevistado por Juan Cruz a raíz de un libro recién publicado sobre el surrealismo, o más bien sobre los surrealistas.
«Al principio “eran dadaístas y apolíticos”, la conciencia de aquella guerra se les despertó “allá por 1924” y ya luego tienen alianzas “hasta prácticamente los años sesenta”; son alianzas “contra natura con distintas formaciones y tramos internacionales”. Hasta que los libera “la lucidez de André Breton, y todos ellos van felizmente abandonando estas malas alianzas, desde nuestro punto de vista actual, con elementos del materialismo dialéctico en sus distintas facetas”.
Hasta que acaban liberándose en torno a 1960, repite Sarrión; cuando se acerca la muerte de Breton “logran la postura perfecta: ni con estos ni con los otros, ni la dictadura fundamentalista ni la dictadura del mercado”.»