Tomás Eloy Martínez comenta con admiración la exposición sobre Goya en el Museo del Prado (Goya en tiempos de guerra), y cree que en sus pinturas sobre el horror se encuentra buena parte de la esencia del hombre. Para entender el corazón humano.
«Hasta ver las obras de Goya en tiempos de guerra yo pensaba que no es propio del arte exponer la crudeza del horror, que no hace falta, que ya la realidad y las fotografías de la realidad hablan con elocuencia suficiente. Pero lo que parecería exigir un sistema de alusiones y de referencias simbólicas, en Goya carece de sentido. Su lenguaje directo, abierto, descubre que el horror no sólo sucede fuera y lejos, sino también dentro de cada uno de nosotros, en lo más hondo de la naturaleza humana.
La mera contemplación del mal, por ajeno que sea, nos transforma en cómplices inevitables.
Susan Sontag ha señalado que hay cierta obscenidad implícita en el acto de mirar el horror de los otros. Goya nos libera de esa obscenidad. Clava las espinas de su arte de manera tan profunda que logra infligir a los espectadores de sus obras cada laceración, cada tormento, cada una de las agonías que sufren sus personajes. La sombra del mismo mal cae sobre todos.»
2008-05-03 13:08
Creo que falta el enlace al artículo. Ya se, ya se, mejor voy a ver la exposición, pero no puedo … además estoy aburrido y quería leer el artículo completo. ;)
2008-05-03 13:12
Ya. Gracias por el aviso.
Saludos