Con motivo del día del libro del pasado día 23 de abril, Jaime Rubio Hancock escribe una divertida Oda a la lectura. Es muy recomendable y, además, como bien hace notar Jaime, el día del libro no se dice de qué libro es: centrémonos, pues, en la lectura.
«Lo cierto es que la lectura es mucho más importante de lo que en ocasiones asumimos. Si no supiéramos leer (números), distinguiríamos los billetes por el color, con lo que los daltónicos y demás acromatópsicos y discromatópsicos serían víctimas fáciles de los timadores. Si no supiéramos leer, los camareros estarían afónicos de tanto recitar las cartas de los restaurantes. Si no supiéramos leer, compraríamos por error café descafeinado. Si no supiéramos leer, intentaríamos entrar en establecimientos cerrados, al no poder leer el cartel que reza “cerrado”. Si no supiéramos leer, no podríamos consultar el día y hora en que tenemos dentista en caso de haber olvidado los detalles de la cita. Si no supiéramos leer, no podríamos repasar lo escrito y por tanto lo texts estar´na plagados de todo clase derrores.
Ah, la lectura. Fuente de conocimiento y placer. No en vano se dice que la pluma es más poderosa que la espada. Ha de ser una espada vieja y una pluma muy larga y afilada, a ser posible con el plumín emponzoñado en algún tipo de veneno que actúe por vía tópica, pero, vamos que si se dice será por algo. Lo dirá alguno que no sabe usar una espada. O que no ha visto una espada en su vida.»