Aunque Enrique Meneses nunca conoció a Marilyn, sí que conoció a Bert Stern, el responsable de su última y más famosa sesión fotográfica, quien le contó las circunstancias en que ésta se desarrolló. Marilyn Monroe y Yo
«Bert Stern estaba alojado en Los Angeles y Marilyn en Las Vegas a finales de julio-principios de agosto 1962 . Durante los días que estuvo trabajando con ella, tomaba el avión a diario y regresaba a L.A. una vez concluida la jornada de fotografía. En Las Vegas se quedaba la actriz y el equipo de peluquería, maquillaje y vestuario. En una de esas noches, Bert acababa de regresar a Los Angeles cuando Marilyn le llamó por teléfono. “¿Puedes volver ahora mismo a Las Vegas?” De todas las extravagancias que se atribuían a la star, esta le parecía al fotógrafo la más inaceptable. “No puede esperar a mañana. Quiero que me fotografíes desnuda”. Me pude imaginar la rapidez con la que mi colega volvió al aeropuerto y tomó un avión del shuttle.»