Jorge Barraza hace una reflexión sobre el esceso exceso de crítica negativa y de amor por la tragedia del periodista contemporáneo, fijándose en el fútbol como ejemplo. El periodismo no es únicamente muerte y críticas, también es vida y elogios.
«Viene a cuento porque mucha prensa asume con rigor de axioma que “la buena noticia no es noticia”. Que no vende. Un abrumador porcentaje de lo que vemos en la prensa es de carácter negativo. Corrupción, violencia, escándalos, fraudes, polémicas, calamidades varias. No puede ser que una inmensa porción del caudal informativo o de opinión esté canalizado hacia las miserias humanas.
Los medios —y en especial los periodistas— se vanaglorian de abrirle los ojos a la gente. Y está bien. Es bueno destapar ollas, denunciar irregularidades, reflejar la realidad. Sin embargo, también es edificante dejar una ventana abierta a la esperanza, encender una luz, provocar una sonrisa, difundir la buena acción, apelar al elogio. Hay sucesos cotidianos que nos reconfortan, actos que honran la condición humana.
Pero existe una suerte de periodismo agrio —un segmento importante— que lo ve todo mal. Es el mismo periodismo que viene anunciando hace 40 años que “Así, el fútbol se muere”. En todo caso es un muerto con una salud de hierro.»
2008-02-26 13:32
exceso?
2008-02-26 17:17
Eso. Exceso.