Dieter Schonebohm cómo en los últimos años unas pocas cadenas de supermercados se han hecho con el control del mercado mundial, y desde su posición dominante fijan precios, salarios y condiciones de producción: Las transnacionales del comercio alimentario.
« Esta posición dominante permite a las cadenas transnacionales de supermercados alimentarios no sólo dictar los precios que reciben los productores agrícolas, sino también el nivel de salarios que se percibe en las empresas proveedoras de estas cadenas. Las denuncias de representantes sindicales desde China a Sudáfrica coinciden: en la medida en que compañías como Wal-Mart o Tesco aumentan la presión sobre los proveedores nacionales, éstos tienden a responder con el aumento de las horas de trabajo y/o la reducción de los salarios.
Paralelamente, y en nombre de la defensa de la calidad, las cadenas tienen el poder de fijar las condiciones de producción, incluyendo el uso de pesticidas, almacenamiento y empaque, lo cual puede constituirse en un obstáculo para muchos productores de los países en desarrollo a la hora de querer establecerse como proveedores de esos supermercados.»