Marta G. Gonzalo pone el Caso de Monseñor Romero en la mira. El opispo salvadoreño, famoso por su defensa de los derechos humanos, fue asesinado en 1980 por un francotirador. Su caso sigue sin esclarecerse.
«En 2000 La Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió tres recomendaciones que el Estado salvadoreño debía cumplir para asumir su responsabilidad en el caso. La primera de estas recomendaciones consiste en que se realice una investigación judicial completa, imparcial y efectiva, de manera expedita, a fin de identificar, juzgar y sancionar a todos los actores materiales e intelectuales de las violaciones establecidas que hay en el caso Monseñor Romero.»