Eduard Punset, ¿Por qué tendemos a prejuzgar?: “Gracias a la neurología, descubrimos que el cerebro utiliza gran parte de su energía para predecir, inventar e imaginar, configurando además divisiones entre “ellos” y “nosotros”. El cerebro también nos agrupa en función de nuestros temores y quimeras. La pregunta pertinente a partir de ahora es si seremos capaces de controlar esta “manía” cerebral, para evitar así respuestas irracionales e injustas hacia los demás.
Hay personas capaces de dar la vida por un equipo de fútbol, o de quitársela a otros porque son de una etnia o de una nacionalidad diferente. Estas divisiones, en general, parecen extrañas. Objetivamente, se aprecia el componente absurdo de esas pasiones: “No tiene sentido”, decimos sorprendidos. Pero cuando se trata de temas sobre los cuales tenemos sentimientos viscerales, no es fácil tomar distancia.”