Aunque redactado un poco apresuradamente, Elecciones marcadas por la violencia y los escándalos en Guatemala, de Julián Ortega Martínez, explica y resume la situación electoral de cara a los comicios de septiembre: “Luego de 11 años de «paz», tras el prolongado conflicto de 36 años entre guerrilleros marxistas y gobiernos militares patrocinados por EUA y que cobró la vida de 200.000 civiles, muchos de ellos aborígenes, Guatemala sigue sumida en la pobreza, la inseguridad y la impunidad. Berger ha sido incapaz de lidiar con las pandillas y la delincuencia común, y quizás tampoco va a lograr que la refinería mesoamericana (proyecto del que Colombia forma parte) se quede en su país. Esta semana, una hambruna en un área del oriente del país denunciada en los medios fue desestimada por Berger. Tras la escalada de violencia, buena parte de los candidatos han hecho de la seguridad el eje de sus campañas y optado por contratar escoltas personales. Algunos delegados del Tribunal Superior Electoral han recibido amenazas en el interior del país.”