La prostitución es un antiguo asunto, que pocos gobiernos se atreven a debatir, y que refleja ¡cómo no! la más puritita esencia del sistema patriarcal.
¿Será por ello que cuesta tanto “meterle mano”?. Algunos países han iniciado acciones no exentas de polémica; en España este debate político y social se ha convertido en la “estrella del verano”.
Alicia Delibes nos ofrece sus
primeras reflexiones sobre la prostitución : “quizás haya que sospechar que el sempiterno problema de la prostitución ha saltado al primer plano de la actualidad con una inusitada intensidad porque, en nuestros días, está apareciendo relacionado con ese otro gran problema que es la inmigración ilegal”.
Vamos que una vez más el tema deja de ser el asunto principal a resolver, para convertirse en un efecto colateral del problema principal.