¿A cada quién según su productividad? es la reflexión de Andrés Vernón sobre la propuesta del candidato a la presidencia de los Estados Unidos Barack Obama «de vincular la paga de los maestros a sus resultados», que también suena por estos lares: “Los maestros (o por lo menos su sindicato) suelen estar en contra. Sus objeciones son razonables, ya que temen que vincular de manera simplista la remuneración con los resultados de pruebas estandarizadas sería discriminatorio. Por ejemplo, un mal maestro que da clases a niños ricos ganaría más que un buen maestro que da claes en el ghetto. En otras palabras, el único sistema válido sería uno que pudiera aislar el impacto del maestro, ajustando por variables como nivel socioeconómico de los alumnos, educación de los padres, etc. Va sin decir que esto no sería nada sencillo, aunque en principio no es mala idea.
Lo más irónico es que esa misma derecha y esos mismos economistas que agitan tanto por ofrecer incentivos a los maestros rara vez critican problemas similares en otros ámbitos, como los esquemas de remuneración de los altos dirigentes corporativos.”
2007-07-17 12:19
El problema de valorar trabajos sin un producto claro es algo recurrente pero difícil de resolver. Como bien dice el autor, debería ajustarse por un montón de circunstancias y. aún así, creo que sería dificil establecer parámetros objetivos para determinar el rendimiento de los profesores. ¿Notas de sus alumnos?¿Salario futuro? .... no creo que sea nada trivial.
Es como valorar el trabajo de los jueces o policías. ¿Número de multas?¿Núm. de casos resueltos? Como decía un profesor en la facultad: Paga por lo que quieras. Si el salario depende de las multas que ponga el policia, este pondrá multas, aún cuando sean de dudosa legalidad.