Marcelo Colussi se sorprende de que en plena era tecnológica, la sociedad siga pidiendo-necesitando
de milagros y canonizaciones de santos, para tranquilizar el espíritu. También se sorprende de la extrema habilidad de la Curia Romana para mantener este interés durante tantos siglos, avivado recientemente con la propuesta de 2 nuevos santos
varones por supuesto y católicos en Guatemala y México.