Comentarios

1. Cayetano
   2007-05-02 14:17

   Muy buenos días.

   De este tema puedo hablar con cierto conocimiento de causa. Actualmente además de lo obvio, es decir el arma manufacturada, hay un aspecto del comercio de armas que no se considera por casi ninguna organización al evaluar las cifras de negocio del comercio de la guerra y la represión. Los gobiernos y la industria ocultan este dato y las ONG y la opinión pública ni se enteran. Doy este enlace para sugerir por donde van los tiros.

   Además hay que considerar que los ingresos del estado español por el epigrafe industria militar, en un sentido amplio, son fabulosos y permite, entre otra muchas cosas, dar de comer a muchos funcionarios, financiar la sanidad, subvencionar el arte y la cultura e invertir en I+d.

   Habría que considerar dos actitudes coherentes como la objección fiscal y otra más peliaguda: negarse a recibir recursos o trabajar para empresas o entidades implicadas en la industria militar.

   La pregunta ¿España seguirá vendiendo armas a Marruecos e Israel? tiene mucha miga. En primer lugar España no vende armas, españa no existe, es una suposición, una convicción. Los individuos que componen el tejido industrial tienen necesidad de vender tecnología y productos manufacturados a otros individuos para utilizarlos en el ejército.

   Además de lo obvio, las armas, están inplicados otros sectores industriales: máquina herramienta, textil, alimentación, etc, etc. de forma directa.

   No vender, no solo armas, significaría un descalabro importante de la economía, otra cosa sería reconducir el modelo industrial hasta no necesitar de ese mercado.

2. Cayetano
   2007-05-02 14:28

   Continua:

   Yo pediría a Intermón Oxfam, Amnistía Internacional, Greenpeace, etc. que revisaran muy bien de donde vienen los recursos que obtienen. Con esto no intento infravalorar su labor, sin embargo hace tiempo que estoy un pelín mosqueado de las estrategias de las ONG ¿Qué parte de No Gubernamental no han entendido?. Tengo algunas respuestas en la recámara :) .

3. Cayetano
   2007-05-02 14:38

   Las ONG (no gubernamentales) deberían considerar la posibilidad de luchar por un derecho no reconocido aún a los ciudadanos: La objección fiscal ¿Demasiado radical y problemático quizá?

4. Montes
   2007-05-02 21:29

   Ante todo por favor….primero se menciona “conciencia de los políticos”, que gran error pensar en esta pequeña frase, no no, primero ante todo vamos a rectificar, debería decirse conciencia individual o de un grupo político, o conciencia individual de un grupo de humanos…..Por otro lado (“organismos que durante años hemos demandado un mayor control sobre un comercio que, sin regulación adecuada, puede ser letal”) de que nivel se esta hablando, este articulo es de risa. ¡Que horror!, como que sin regulación adecuada puede ser letal…que idiotez, como se puede pensar de esta manera….por dios.

   La realidad, es una pena que parte de las economías de las grandes potencias se sustenten en la industria armamentista, y claro que es un negocio que deja millones de ganancias, y naturalmente para poder existir necesitan de candidatos y si no los tienen se encargan de inventarlo, y como dice una canción de Fito,”el Dinero que te salva es el mismo que Acecina”. Cayetano: “Reconducir el modelo industrial hasta no necesitar ese mercado” por Favor.

5. Marga
   2007-05-03 00:51

   Todo lo que sea pedir más información pública sobre los mercados, está bien. Ahora bien, en cuanto al control, las ONG tienen mucha tela: saben de sobra que no habrá control posible mientras no existan organismos internacionales serios, y con recursos, capaces de afrontar esa tarea. Con lo que “el control” queda reduccido a lo que tal o cual bloque de gobiernos o gobierno quiera hacer, o lo que es lo mismo: a los gobiernos donde la opinión pública cuenta algo. Lo cual excluye a la gran mayoría de los países del planeta, porque el negocio de las armas no es cosa sólo de los grandes. En la práctica, las ONG están pidiendo nada más y nada menos que unos dejen de producir o limiten la producción, lo cual supondría inmediatamente y ya supone en el mercado de las armas pequeñas que las produzcan y vendan otros.

   Mientras sigan funcionando con criterios nacionales (genial ese “España”, como dice Cayetano), su utilidad es más bien dudosa. Y terminan haciendo lo que Amnistía Internacional: como no tiene delegaciones en prácticamente ningún sitio donde se violan salvajemente los derechos humanos (no encuentra “contrapartes” serias o se ve obligada a cerrar delegaciones enteras del tercer mundo por comportamientos mafiosos), termina hablando de oídas o dedicando gran parte de sus denuncias a los países del mundo donde, curiosamente, menos se violan los derechos humanos (UE). Y eso sólo es la punta del iceberg.

   Besos para todos,
   Marga

6. Cayetano
   2007-05-03 15:37

   A nada que tenga un ratito quisiera, Marga, apuntar algo a propósito del comercio de herramientas de tortura. Dejo enlace para no perderme :)