Rolando Grabrielli nos deja la crónica de su encuentro con el poeta chileno Gonzalo Rojas en Bogotá: “Rojas de la provincia del viento y del carbón, hijo de Chile entero, iberoamericano por adopción, se tomó la palabra y dijo: «la historia es imaginación y palabra; el libro es palabra; el hombre es palabra; todos somos palabras». Seguidamente o antes, para el caso es lo mismo, se había declarado «bogotano» y ya el auditorium estaba en su bolsillo, con su imaginería ladina, cazurra y sagáz. Holderlin, agregó con voz profunda, advirtió que la palabra era el más peligroso de los bienes. En toda su estancia bogotana , Rojas se ha referido al renacer de su niñez y a su vocación iberoamericanista, porque «todos somos de la misma patria. La mía es iberoamérica entera, a esa patria aposté siempre», enfatizó.” Gonzalo Rojas, palabra por palabra en Bogotá.