En asuntos de terrorismo nacional no estoy de acuerdo con Fernando Savater, o no lo estoy en lo esencial, aunque reconozco que me es muy fácil discrepar de sus opiniones y a él le cuesta muy caro decir lo que dice. La Entrevista que le hace Santiago Roncagliolo es interesante, porque trata temas varios y hace preguntas complicadas de responder: “-Sin embargo, la vocación pacífica del EZLN que usted reconoce, sólo ha sido posible tras un estallido de guerrillero de seis años. ¿En este caso la violencia llevó a la paz?
-Desde sus inicios hace seis años, el zapatismo apostó por reducir al mínimo —a lo meramente demostrativo&mdash, su violencia. Es eso lo que me gusta de él, aunque quizá un movimiento político con objetivos similares podría haber optado por un planteamiento menos militar aún. En cualquier caso, no olvidemos que México no es una democracia plena —Vargas Llosa llamó al sistema priísta “la dictadura perfecta”— o lo es sólo desde las últimas elecciones a la presidencia.
-¿La democracia es perfecta?
-Tengo muchas críticas democráticas al funcionamiento y los logros de la democracia, pero siempre desde dentro: no contra la democracia misma, como si fuera hubiese algo mejor o ni siquiera un terreno políticamente racional desde el que criticarla.”