Podemos o no estar de acuerdo con la opinión de Miguel Moliné Escalona, pero la parte informativa de su artículo parace poco discutible, y necesaria: “Indulgencia: dícese de la facilidad con la que determinados medios de comunicación disimulan los pecados del ínclito Polanco y de sus protegidos. A las pruebas me remito: el 5 de febrero del presente año, José Blanco (PSOE) anunció un boicot contra Telemadrid en virtud del cual, los socialistas ya no participarían en los programas de dicha televisión autonómica. Una semana más tarde los socialistas baleares adoptaban la misma medida en relación con la televisión autonómica IB3. Al margen de las razones esgrimidas por ambas federaciones socialistas, nadie podrá negar la evidencia ya que dicho boicot fue anunciado en sendas ruedas de prensa.” Indulgencia.
2007-03-30 13:55
Hay más precedentes, por ejemplo. en septiembre de 1996, el entonces presidente del Bizkai Buru Batzar, Javier Atutxa declaró un boicot al Diario El Correo,
2007-03-30 14:07
Tambien es significativo este estudio sobre el comportamiento de los ciudadanos del Pais Vasco ante la influencia de los medios en sus opiniones políticas. No se si es extensivo al resto del Estado, pero las propuestas de boicoteos suelen degradar la imagen del partido que lo propone. No es de extrañar que no todos los políticos del PP estén de acuerdo con el boicot a Prisa.
2007-03-30 14:21
Cuando algunos partidos (organizaciones en busca de poder) declaran boicot a un medio de comunicación, lo hacen en su faceta propagandística (la del medio de comunicación, digo) o lo hacen en su más frecuente faceta de incomunicación y propaganda? Pregunto…
2007-03-30 14:38
En mi opinión, ambas facetas se dan en forma simultánea dependiendo del contexto y las circunstancias del momento. Los medios de mayor difusión tienen que hacer verdaderos malabarismos ideológicos para aparentar profesionalidad. Tanto Vocento como Prisa, por citar un ejemplo, han de equilibrar intereses empresariales (no políticos) con temas que atraigan la atención de la audiencia, o tratar temas que no interesarían a nadie en forma espectacular (haciendo creer que determinado asunto es de vital importancia). Se trata de un toma y daca donde lo que menos importa es la información sino la venta de una mercancía, en rigor no hay manipuladores sino vendedores, por ejemplo, el grupo empresarial dominante potencia uno u otro medio, uno u otro partido en función de los resultados que puedan obtener (o apuestan por varios posibles ganadores en forma simultánea). Me parece a mí.