Casi a la vez que Antena 3 anunciaba a bombo y platillo que abría un canal propio de vídeos de la cadena en YouTube, Viacom (propietaria de la MTV entre otras cadenas) decidía denunciar al famoso portal de vídeos on-line por la friolera de mil millones de dólares. MTV, esa cadena que obtuvo esa publicidad viral brutal gracias al famoso «Amo a Laura» emitido hasta la saciedad… por YouTube. Lo explica Enrique Dans: “No es YouTube la que sube contenidos a ningún sitio, sino los propios clientes de Viacom. Los lloriqueos del tipo “mis clientes son malos, malísimos y me roban” ya estamos hartos de oírlos en otra industria, la de la música: sabemos ya de lo estúpido y trasnochado de tales argumentaciones y de su inutilidad práctica. Si tus clientes toman tus contenidos y los replican en otros sitios, es porque existe una demanda para esos contenidos que tú no estás siendo capaz de satisfacer, que podría generar negocio, y que tú, Viacom, en tu suprema cortedad de miras, eres incapaz de cristalizar en ingresos. Por eso ahora señalas, cual perro del hortelano que ni come ni deja comer, a un tercero que sí genera ingresos, en lugar de intentar legítimamente capturarlos tú o apoyarte en sus capacidades para hacerlo.” Viacom, YouTube y Groucho Marx.