Guy Sorman nos traslada las opiniones del jefe de la policía de Nueva York sobre el terrorismo, algunas ya escuchadas en otras bocas, pero otras interesantes, sobre todo viniendo de alguien dedicado noche y día a evitar un próximo atentado: “¿Qué opina de Irak? Los partidarios de la guerra aseguran que ésta fija allí a los terroristas que ponen bombas, bien lejos del territorio norteamericano. Quienes se oponen a la guerra piensan que, por el contrario, Irak se ha convertido en un campo de entrenamiento para futuros terroristas que, tarde o temprano, se replegarán hacia Europa y Estados Unidos. Kelly se inclina, más bien, por la primera teoría, aunque espera que las tropas norteamericanas se queden allí algunos años más «para terminar el trabajo». Por ahora, no se ha comprobado ningún desplazamiento de terroristas salidos de Irak. Kelly se mantiene alerta. También vigila atentamente las trayectorias personales de todos los presos que se convierten al islamismo en las cárceles neoyorquinas. Representan un 18 por ciento de su población carcelaria, contra un 50 por ciento de musulmanes, según cree, en las prisiones francesas.” Neoyorquinos, bajo amenaza terrorista.