Peleón, cabezota, convencido de lo que dice, Álvaro Pons comienza un nuevo blog sobre cómics confesando su «adicción» en voz alta y sin avergonzarse de ello. Porque lo cierto es que todavía sigue siendo casi hereje declarar admiración por el noveno arte: “Y es que, aun hoy, esto de leer tebeos sigue estando mal visto. Se puede ser un aficionado irredento a la música, dejarnos las pestañas en la oscuridad de las salas de cine o aumentar nuestra miopía de forma galopante devorando libro tras libro, todo llevará detrás el aliento indiscutible de la cultura. Pero, ¡ay! si lo que hacemos es leer tebeos, lo único que podemos esperar es cierta condescendencia perdonavidas que nos mirará por encima del hombro pensando, caritativamente, que algún día creceremos y volveremos al redil de las buenas costumbres.” Hola. Me llamo Álvaro y… me gustan los tebeos
Hola Álvaro. A mí también me gustan, mucho además.
2006-12-19 17:20
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Lo que pasa es que decir que “me gustan los tebeos” es como decir “me gusta el cine”, “me gusta beber agua”, “me gustan las cosas dulces”. Son cosas que le gustan a casi todo el mundo. Son cosas fáciles para que le gusten a la mayor cantidad de gente posible, así que decir que te gustan es como no decir casi nada..
2006-12-19 18:23
No estoy de acuerdo. Los tebeos siempre han estado considerados la cuarta dimensión de la cultura, como la ciencia ficción, y si alguien reconoce que le gusta o es porque es un friki o lo dice con la boca pequeña o hay que añadir “si, bueno, como afición de segunda clase”.
Lo que Álvaro propone es decir “me gustan los tebeos” con la misma tranquilidad académica con la que se dice “me gusta Proust”. Desde luego no me parece que sea como no decir casi nada.