En el siglo XXI, como en cualquier otro nuevo milenio,
todos deberiamos empezar por ser originales: necesitamos crear otras ciencias y otras artes.
He aqui la Polimecanica Educativa, un nuevo sistema de
re-conocimiento que propone el re-conocerse a si mismo y
no respetar las opiniones de los demas. Esta seción dejó de actualizarse en agosto de 2007.
Cada vez que empezábamos una partida de ajedrez, el señor HASSAN recitaba unos versos en latín, mirándome fijamente a los ojos. Tantas veces he oído esas palabras que hoy pudiera repetirlas hasta dormido:
INCIPIUNT CARMINA DE LUDO SCACCHORUM
LUDUM SCACCHORUM, SI QUIS VULT SCIRE DECORUM
HOC CARMEN DISCAT, SI DOCTE LUDERE GLISCAT.
Años más tarde, logré comprender las palabras de esa canción, gracias a mi maestro de latín, GOHUGEA SLABULUNG PECUTA, un graduado en HEIDELBERG y luego arrojado en la calle Cuza por los mismos acontecimientos políticos.
Todos esos señores de la corte del Rey, tomaron el asunto como algo natural y lo consideraron un juego del destino.
Cada dos veces se reunían en el parque del BULEVAR TUDOR y escuchaban las palabras del poeta DORBA según el cual toda persona podría aprender en ochenta y un días a ser un auténtico poeta.
De vez en cuando, el señor HASSAN me instruía en ciertos asuntos amorosos.
-Cuando seas grande, considera al ajedrez como un medio para conquistar a las damas. Para gustarles, déjales alguna ventaja en el juego. Una joven mujer debe saber ajedrez. Si no lo sabe aún, no dejes de enseñarle, no sin aprovecharte de los TOQUES que estudiaste frente al tablero. El cuerpo de la mujer es tu tablero, por si no lo sabes.
Cada vez que un hombre y una mujer hacen el amor, están jugando ajedrez, según mi maestro, el RABBI ABRAHAM-ABEN. El escribió un pequeño poema sobre el ajedrez.
En hebreo se llama CHARUSIM AL SECHOK SHACK MATH o CARMINA RHYTMICA DE LUDO SHAH-MAT, como diría el profesor GOHUGEA SLABULUNG PECUTA.
El señor HASSAN me interrogaba sobre mi padre y anotaba todo lo que yo le trasmitía de mis conversaciones con él.
Yo no comprendía el interés que este señor, mucho más viejo que mi padre, depositaba en las palabras triviales de un pintor de brocha gorda.
En realidad mi padre no hablaba mucho y cuando hablaba, siempre decía cosas – para mi entender de aquel entonces – totalmente incoherentes.
Cuando mi padre se murió, me dijo las siguientes palabras: “Yo me voy por el camino de todos. Ten valor y se hombre”.
El viejo pintor de iglesias cerró sus ojos y manos, en un signo de bendición. En la cama, debajo de su almohada encontré un peón de madera amarillo envuelto en un papel, que decía: “. . . Hijo, transforma ese peón en algo poderoso que te lleve hacia la victoria…”.
El señor HASSAN reflexionó por un instante y poniendo sus manos en mis hombros, dijo:
-Sabes, lo que tenía que comunicarle al pequeño rey MIJAIL te lo voy a transmitir a ti. Para todos nosotros aquí, tú fuiste elegido para convertirte en el rey de la calle Cuza. Alguien debe recibir la doctrina para que las palabras sean vivientes. En este juego de ajedrez y su estrategia, el Rey no tiene ningún poder, solo. Su salud depende algunas veces de la pieza menos importante. El no puede atacar ni defenderse, sin la ayuda de sus soldados. Pero todo esto es tu cuerpo y tu destino. No creas que el asunto se refiere a una guerra llevada en campos y matorrales. Este es el secreto. Durante cada juego que juegues en tu vida, por favor, trata de componer un poema y al final, de la partida, recítalo a tu contrincante como los antiguos samurai de Japón hacían antes de morir. ¿Tu padre no te dejó ningún poema?
-No. Sólo encontré ese peón amarillo y las palabras escritas en un papel viejo.
-El peón mismo es el POEMA -dijo el señor HASSAN.
-Cuando yo era joven fui atrapado en el MEDITERRANEO, por unos corsarios malteses y vendidos como esclavo a un turco, que por fortuna era un gran amante del ajedrez. Después de jugar con él varias partidas le gané una considerable suma de dinero, mi libertad y la mano de su hija. Pero yo amaba más mi libertad que una rutinaria vida de familia y me fui a BARCELONA, donde viví treinta años hasta que el viejo rey CAROL me contrató como maestro de la corte de RUMANIA. Esto ocurrió tal vez, porque acababa de recibir el título de “CABALLERO ERRANTE”, que otorga el rey de PORTUGAL a los jugadores de ajedrez que obtuvieran ciertos logros en partidas difíciles. El rey de RUMANIA era un gran amigo de la Corte de LISBOA.
-Sabes, nosotros, los jugadores de ajedrez no podemos ni debemos comer mucho. Es una ley no escrita que te ruego respetar toda tu vida.
Mientras el señor HASSAN estaba hablando, mis manos apretaron tanto el tablero que la sangre comenzó a salirme por las uñas.
-¡Ah! NADIEL, NADIEL. No te emociones tanto. Tienes todavía mucho que oír y mucho más para ver.
Con una diligencia de médico, el maestro preparó una solución de agua hirviente con sal de higuera y me obligó tener las manos hundidas en la olla durante dos horas, mientras agregaba más y más agua hirviendo.
Aquellos momentos están envueltos en la niebla benigna de mi memoria.
El señor HASSAN siempre perdía conmigo. No cabe duda que me dejaba ganar para analizar mi juego. El decía que las pasiones de la mente, el fastidio, la presunción, el amor propio, la avaricia, la locura y otras cosas más se descubren durante el juego de ajedrez.
-”Por esta razón, los señores CABALLEROS de SUECIA, antes de ofrecer en matrimonio a sus hijas, tienen la costumbre de probar al ajedrez el mérito de los pretendientes. Nunca juegues ajedrez en la cama”.
-Después de completar tu instrucción te daré un escudo y el permiso de usarlo. Es un escudo con la figura de un tablero, por el cual se reconocen los iniciados en el gran juego interior. No debes mostrarlo a todo el mundo, sino a ciertas personas que tú consideres dignos de saberlo. Hay algunos individuos que odian el ajedrez y los reconocerás por una marca que todos tienen entre las cejas. Nosotros llamamos esta enfermedad CHESSO PHOBIA. Entre los que estuvieron en contra del juego de ajedrez está PETRARCA; JEAN HUSS muerto en 1415 y rector de la universidad de PRAGA; JACQUES VI, rey de ESCOCIA que hasta escribió un libro para su hijo, donde le prohíbe jugar ajedrez; un MAESTRO DOMINICO de nombre INGOLD
que tiene las bolas de considerar el ajedrez como uno de los siete pecados capitales; el rey LUIS IX de FRANCIA, que prohibió públicamente este juego en 1740 bajo pena de multa; MONTAIGNE, muerto en 1592, que habló mal de ALEJANDRO el GRANDE, un amante del ajedrez. En el reino de EDUARDO IV de Inglaterra, se encuentra una ley que prohíbe la entrada del ajedrez en el PAIS.
Esa gente estaba loca. SAN BERNARDO considera con satisfacción que uno de los méritos de los templarios, es tenerle horror al ajedrez. Todos ellos creían que jugar ajedrez es una pérdida de tiempo.
Otro cura, el padre AUERS, aconseja a los cristianos en 1686 evitar el ajedrez por ser un pasatiempo pernicioso.
Quien no ama el ajedrez es un necio.
En 1125 el OBISPO GUY amenaza con la excomunión a los sacerdotes que jugaran ajedrez.
Tal vez este último tenía razón porque su castigo era dirigido hacia los sacerdotes “que osarían jugar ajedrez sobre las tumbas de los muertos en los cementerios”.
EULES de SULLY un obispo de París muerto en 1208, defendía el derecho de tener un tablero en cada monasterio.
Hubo en París un sacerdote de nombre PICHARD, que hizo gala de tanta elocuencia en sus sermones en contra del juego de ajedrez, que los parisinos presentes retornaron a sus casas y se apuraron a quemar en las calles sus tableros.
-Señor, ¿Usted cree que el ajedrez debe enseñarse a los niños?
-Si.
Cuando yo era niño soñé que en el camino a casa había encontrado un gran tablero con piezas de madera que estaban ordenadas para una partida. Yo moví mis caballos y las piezas del sitio contrario se movieron solas, haciéndome jaque mate por tres veces consecutivas. Le conté ese sueño a mi maestro al día siguiente, y recibí la siguiente enseñanza:
-Hijo mío, cuando yo tenía tu edad tuve también un sueño, pero fue un sueño feo. Se hacía que SATANAS estaba jugando ajedrez con un hombre cuya alma le fue encomendada. El lugar en donde pasaba la acción era, como tú supones, el propio infierno, una de las salas del TRASMUNDO. Una tumba fue transformada en un tablero. De un lado, un joven hombre sentado, con la cabeza apoyada en sus manos, observa atentamente la partida. SATANAS, envuelto en los pliegues de un largo manto, tiene una apariencia muy noble pero sus rasgos dejan entrever todos los vicios que se le asignan a ese personaje.
Te repito, había tres personajes: Satanás, el viejo contrincante y el joven testigo.
Detrás del viejo personaje había un ángel que el hombre no podía ver, pero si el joven y también Satanás, que además tenía que tolerarlo como un segundo testigo.
Las piezas satánicas representaban al propio SATAN como REY, a la LASCIVIA como REINA, a la FLOJERA con cabeza de cochino, la COLERA con cabeza de gallo, el ORGULLO con cabeza y cola de PAVO REAL, la ASTUCIA con cabeza de GATO, la ENVIDIA, la AVARICIA, la INCREDULIDAD. Los peones figuraban todos esos caminos del vicio, incluyendo a la DUDA con su cara de murciélago.
Las piezas del viejo hombre representaban un REY que es un corazón-ESPIRITU, la REINA que es su FE, y las otras piezas como la ESPERANZA, la VERDAD, la PAZ, la HUMILDAD, la INOCENCIA y el AMOR, con los peones figurando los caminos de la ORACION.
Este juego de ajedrez representa el combate espiritual de los vicios en contra de las virtudes.
Mi viejo maestro continuó: ”...Al día siguiente le conté el sueño a mi maestro que me escuchó con atención y me respondió lo siguiente:
“Querido hijo, cuando yo era de tu edad soñé algo que trastornó mis pensamientos durante largo tiempo. El sueño fue el siguiente:
Frente a mi, un GRAN TOPO BLANCO sentado delante de un tablero pronunció la palabra ALMATERIA.
Luego continuó:
Existe entre los topos un juego muy parecido al ajedrez humano: la pieza principal se llama TOP y su equivalencia con el Rey de nuestro juego es casi perfecta. El nombre de este juego es TOP, el ajedrez de los topos y fue creado por Heráclito, que en aquellos tiempos vivía en su bosque… El Rey es el Topo Blanco, imagen de la máxima jerarquía espiritual en el mundo subterráneo; la Reina o la Dama es la Piedra estela, una suerte de monolito adorado en todos los sistemas de la civilización de estos curiosos seres de cuerpo aerodinámico; el Alfil es la Lombriz, alimento de los topos; el Caballo es representado por la Lechuza leonada, terrible enemigo y figura mítica de todas las generaciones de los topos del planeta; la Torre es una Haya, árbol importante en la geografía de cada sistema; y los Peones son cachorros de topos aún amamantando.
Cada una de las piezas está representada por una fruta seca y cada movimiento se designa por la expresión hacer túneles o cavar diferentes formas de túneles. Las cápsulas y las piñas en el ajedrez de los topos pertenecen a diez tipos de frutos secos de coníferos y árboles: el Cono de Pino, la Piña del Cedro y del Abeto silvestre, la Bellota del Roble o de Alcornoque, el Hayuco de la Haya, la Azarolla del Serbal, la Baya de Enebro, la Sámara del Olmo, la Castaña del Castaño de Sombra, la Judía de Catalpa y la Nuez del Nogal. El Ajedrez de los Topos es un juego vegetal que ostenta una cierta cantidad de frutos secos, verdes y maduros, ordenados todos sobre una corteza agrietada profundamente, cuyo color es generalmente pardo con manchas alternas, ordenadas a lo largo de las grietas. Las manchas de forma cuadrada son agregadas después de ser sacadas de la corteza blanca del Abedul Papelero llamado Abedul de canoas. El Hayuco, el fruto de la Haya, tiene una envoltura leñosa y erizada de asperezas. ¡Ay! ¡El contacto con la fina piel de la zarpa produce escalofríos!
El ajedrez de los Topos está conformado por treinta y dos frutos coníferos secos, verdes y maduros, ordenados en cuatro filas, como a continuación se describe: dieciséis bellotas, entre las cuales ocho son maduras y tienen un color marrón cerrado, luego ocho verdes de un color blancuzco con el copete blando. Entre las piezas principales, el individuo más importante es el Cono de Pino. Las Bellotas de Roble tienen una cúpula en que se aloja casi la mitad o dos tercios de su cuerpo. El fruto de la Salvadera es una cápsula leñosa compuesta de doce a dieciocho cocas que al desecarse se abren súbitamente por el dorso en dos valvas, se desprenden elásticamente del eje y producen un estampido semejante a un golpe de dos maderos planos: el célebre sonido A.
La Azarolla, fruto del Serbal común o Azarollo es de un verde amarillento y pardeado, al pasarse de madurez. La cápsula llena de aire del Jabonero, contiene tres semillas negras de forma redondeada, que los pequeños topos que aprenden el juego del TOP se comen a escondidas, mascándolas rápidamente.
Existe también en el tablero cuatro Bayas de Enebro con su sabor aromático, amargo y resinoso, cuatro Conos de Cedro del Líbano más cilíndricos que el de Pino, Bellotas del Roble y Sámaras de Olmo. Estos frutos secos nunca se abren al madurar, ni dejan que escapen sus semillas. Luego hay cuatro piñas colgantes de Sequoia con escamas muy arrugadas, hundidas con un pequeño saliente en el centro de la depresión; cuatro conos globulares de Araucaria, pardos en la madurez y de escamas terminadas por una punta saliente; cuatro frutos de Ciprés compuesto por seis o catorce escamas cuya maduración de las semillas dura casi dos años; Piñas de Abeto colgantes o erguidas y solitarias o enhestadas, a falta de las cuales se puede utilizar la Piña erguida del Abeto Silvestre, larga, azul violácea o verdosa antes de su madurez.
Buscar todos estos frutos por los peligrosos senderos del bosque no es tarea de aficionados. Hay una Piña recurvada, de color gris mate, de cinco a ocho centímetros de longitud, que sólo es encontrada por los topos iluminados. Algunos frutos secos se ponen pardos al madurar y otros adquieren el color gris. Las Piñas del Pino marítimo tienen un corto pedúnculo muy grato al paladar, que debe ser de color pardo rojizo cuando se come. Las Piñas violáceas del Pino Cembro atraen a los machos en celo, y el elegante porte de las largas piñas junto con las castañas comunes después de haberles quitado la envoltura de erizo con pelos punzantes, son motivo de reflexión para las hembras.
Algunas bellotas están engarzadas hasta la mitad en una cúpula de escamas levantadas y las más curiosas piezas del TOP son las cuatro judías de Catalpa, unas cápsulas que encierran numerosas semillas planas, cubiertas de pelos blancos. Las nueces de envoltura verde como cáscara que se separa del fruto al madurar, acarrean graves problemas de color a los técnicos que prefieren a los de cubierta leñosa, en cuyo interior está la semilla comestible. Dos de las cápsulas se meten en la savia lechosa del árbol, espesa y blanca cuando sale del tronco, savia que luego se pone amarilla en contacto con el aire y en pocas horas se coagula. Esta leche vegetal sirve para pintar de amarillo las piezas del ejército opuesto.
La cápsula de Salvadera es la compañera del Cono y es la pieza con más movilidad en el tablero. Si el Cono domina el mundo vertical, la Cápsula domina el plano horizontal. Hay que tener extremo cuidado con el fruto del Castaño de Sombra, de color castaño lustroso: las sustancias tóxicas que contiene pueden producir la muerte instantánea a todo topo menor de seis meses. Por esta razón los niños topos llamaron a esa castaña la Castaña Loca.
Los que salen en búsqueda de las piezas del TOP, tapan las llagas de los árboles con un poco de tierra húmeda y cantan una breve balada que recuerda a San Fiacre, el monje que inventó un ungüento de que se sirven los jardineros para curar las heridas que hacen a los árboles en la búsqueda de corteza para los grandes tableros de la corte principal.
La suma importancia de este juego, el ser muy usual entre los topos de clase o de esmerada educación, su misma complicación vegetal y el ser uno de los que más vivamente interesan y mortifican el amor propio, lo hacen tan delicado y rígido como ninguno. Estos son los motivos por los cuales habría de observarse en él ciertos principios de urbanidad boscosa, que lo cuiden de la grosería y gozo salvaje que otros juegos de los animales ofrecen al estudioso del bosque. Las reglas de urbanidad vegetal que los ancestros topos fijaron para uso de los interesados son las siguientes:
El jugador de menos clase o el de menos edad, debe ceder a su contrario la elección del color de las bellotas; teniéndose, aunque injustamente, por preferible el verde.
A las damas topas es costumbre ceder el juego pardo, dícese que por contraste con sus zarpas.
A los cortos de vista también, para que perciban mejor el juego contrario.
Para la salida, si no hay ventaja o convenio verbal, echa suertes el topo más joven o el menos caracterizado, tomando un Cachorro de cada color en cada zarpa, para que el otro jugador toque uno de ellos y salga si ha acertado, con el Cachorro de su color.
A causa de la importancia que la Dama tiene en el juego, llamada entre los topos la Topa-Topa, y del desnivel que se establecería en una partida si por sorpresa se prendiere, se acostumbra entre los topos darle TOP cuando se encuentra en peligro, obedeciendo en esto un principio caballeresco hoy perdido entre los jugadores del sistema amazónico.
Aunque algunos establecen que salga en una partida el que ganó la anterior, es más cortés verificar lo contrario.
Debe usarse con mucho rigor la ley de bellota tocada-bellota jugada y la de bellota jugada-bellota sentada, de este modo no se da lugar a reclamaciones y se muestra un desinterés loable.
Debe procurarse jugar de memoria y no tener las piezas más tiempo que el preciso, bajo las zarpas.
Debe tenerse presente que éste es el Juego del Silencio y que, ni se debe humillar al contrario con alusiones a sus jugadas ni a las propias, ni debe distraerse a un jugador con ciertas conversaciones generales como en señal de suficiencia, ni debe hablarse si no es preciso.
Es de pésima educación topera volcar y arrastrar las bellotas sobre el tablero, ni en señal de despecho, ni como signo de rendirse.
Las conversaciones posteriores al juego, alusivas a él, deben ser muy atentas y llenas de deferencia hacia el contrario.
Entre los topos expertos en TOP, el jugador inseguro que toca todas las piezas antes de jugar, sin decidirse por ninguna, es llamado el Pianista.
Pero tanto el número de los topos que conoce el reposo del espíritu como el de los humanos, es escaso.
Yo tenía que irme a mi casa. Me levanté y pedí permiso de salir.
El señor HASSAN me dijo:
-Sólo quiero preguntarte una cosa. ¿Sabes quién era el JOVEN que miraba la partida de ajedrez, entre SATAN y el otro jugador del sueño de mi viejo maestro?
-No se.
-Eras tú.
El día siguiente el señor HASSAN me instruyó en las leyes del Ajedrez interior y conversamos sobre ciertos aspectos de la concentración.
-Antes de entrar en detalles debes saber que hay en nosotros un combate más arduo y más agotador que todas las guerras visibles. Aquellos que emprenden el combate interior del espíritu deben estudiar y entender el misterio del ajedrez de los topos. El reposo de la mente es privilegio de aquellos seres que enfocan toda su energía y voluntad en el ejercitar de la sobriedad del cuerpo, del ayuno de la palabra y del pensamiento.
Comencemos por privarnos del exceso en los alimentos, disminuyendo tanto como sea posible la bebida y la comida. La sobriedad es digna de su nombre de “camino”, pues conduce al reino interior. Hay ocho caminos en el Ajedrez.
A su vez, el Ajedrez merece el nombre de “oficio del espíritu” pues allí se trabajan y se pulen los rasgos de nuestra mente, para hacerla pasar de la condición apasionada a la impasibilidad sosegada de la quietud motora. La sobriedad es la pequeña ventana por la cual penetramos al reino del mundo secreto del ajedrez.
La primera puerta que se abre sobre el conocimiento del ajedrez interior es el silencio cuidadoso de los labios, observado con cautela hasta tanto la mente no haya alcanzado su silencio.
La segunda es una abstinencia calculada de bebida y de comida.
La tercera un recuerdo y una meditación incesante acerca de la muerte, al contemplar el tablero y sus linderos donde descansan inamovibles las piezas que ya no participan en los latidos de la partida. Todas estas rememoraciones purifican el alma y el cuerpo, y fortalecen el intelecto en la concentración de seguridad que adquirimos al saber que nadie escapará a la muerte.
El recuerdo de la muerte, esta hermana de ADAN, ¡cuanto no hemos deseado conservarla siempre como compañera de nuestras partidas invisibles, descansar cerca suyo, conversar con ella, acariciar sus espantosos cabellos, interrogarla acerca de la muerte que nos espera cuando hayamos abandonado este juego!.
Esa es la PARTIDA MAYOR.
Pero el olvido, ese vástago tenebroso que desplaza el pasado hacia el presente y nos obliga a retornarnos del camino de toda empresa, a menudo nos ha impedido hacerlo.
Se trata de una guerra secreta en la cual los espíritus malos-pensamientos combaten contra el alma-energía a golpes de múltiples modificaciones mentales. Como el alma es incorporal, las potencias del mal la atacan inmaterialmente conforme a su naturaleza. Se preparan armas y frentes de batalla, se desarrollan emboscadas y terribles conflictos, existen combates cuerpo a cuerpo…, victorias y derrotas se comparten en el curioso tablero, en forma de estrella que nosotros llamamos “cuerpo humano”.
Un solo punto de semejanza falta en la guerra espiritual de este juego: es la declaración de las hostilidades…
Ella estalla repentinamente y sin previo aviso, sin ultimátum, con una incursión en las profundidades del corazón sorprendiendo al alma en una emboscada mortal.
¿Por qué tales asaltos?
Para impedirnos cumplir con los designios de la inquietud interior.
Aprenderás que existe en el corazón otro ajedrez invisible, cuya guerra se empalma con el combate de los pensamientos impuros inspirados por los espíritus de la malicia.
¿Qué valor pueden tener estas palabras para un joven de nuestros días?
“Demonio” es un término para designar a la ira, a la tristeza, al rencor, al miedo, a los celos y a una cantidad de estados mentales y sentimentales humanos que alejan al individuo del centro, del lugar que abriga a la armonía.
El hombre que durante todo el día repasa el recuerdo de la muerte, tiene más agudeza para descubrir el descenso de los “demonios” y puede expulsarlos inmediatamente.
El recuerdo suave de tu MAESTRO acompañado por una benéfica seriedad puede en todo momento llegar a destruir la fascinación huidiza de los pensamientos, la diversidad de los proyectos y sugestiones, palabras, sueños e imaginaciones tenebrosas, en suma todas las armas y todas las tácticas y estrategias que el artesano de lo mundano, la mente, pone en práctica impunemente para devorar nuestra energía.
Joven, debes saber con máxima claridad qué es el ALMA, dónde está la MENTE, quién eres tú y cómo se llega al ESPIRITU luminoso que impregna todo tu ser.
Aquel que ha gustado esta luz, me entiende.
Esta luz, una vez saboreada, aprieta dulcemente en adelante cada vez más al Alma con una verdadera hambre, ¡pues el alma come sin jamás saciarse!, cuanto más come más hambre tiene.
Esta luz atrae a la mente como el sol atrae al ojo, esta luz es inexplicable en sí misma y, sin embargo, se hace explicable, no en palabras sino en la experiencia de aquel que es herido por ella. Esta luz me impone el silencio, aunque mi espíritu hallaría placer en extenderse mucho más…
Escucha como debe combatirse en esta guerra que se desarrolla en nosotros, día tras día, y sigue mi consejo: a la sobriedad une el silencio y la sobriedad purificará el silencio y el silencio purificará a la sobriedad.
Reunid vuestro intelecto disperso por medio de la concentración, fundamentalmente por la noche, pues el intelecto es por lo general más puro en ese momento, más lleno de luz y más dispuesto a contemplar las sombras interiores con más lucidez.
Aquellos que no arrancan de su corazón los malos pensamientos, no dejarán de traducirlos en sus correspondientes malas acciones.
Hay que saber que la pasión es una disposición inveterada del alma hacia las oquedades externas.
El alma tuya está sentada delante de tu espíritu en el tablero de tu cuerpo y los dos participan en el fascinante juego del AJEDREZ INTERIOR.
Martín Lutero en sus DISCURSOS DIVINOS escribió un pasaje místico sobre el ajedrez. No se si alguno de los jugadores modernos de ajedrez lo haya leído.
El ajedrez no es para “jugar”.
Es para Saber
y para Hacer
y para Cambiar
y para Luchar
y por fin, se terminan estos PARA que, en lo último, pero no en lo menos importante,
GANAR PERDIENDO.
Cuando PIERDES ganas un VACIO.
Los grandes maestros del ajedrez dicen que si no puedes vencer has de retirarte, mientras que yo creo que si no puedes vencer, debes vencer de todas maneras.
Cuando de nuevo interrogué a mi maestro si podía enseñar lo que él me había transmitido, me respondió por medio de una parábola:
“Un mercader tenía la intención de emprender un viaje. Eligió a un asistente y lo puso a trabajar en su tienda. Por su parte, él pasaba casi todo el día en el cuarto adjunto, desde donde podía oír lo que se hablaba en la tienda. Durante el primer año escuchaba, de tanto en tanto, lo que su sirviente le explicaba a un parroquiano: “El amo no puede venderlo por un precio tan bajo”. Y el comerciante no viajó. En el segundo año solía oír ocasionalmente la voz que en la habitación vecina decía: “No podemos venderlo tan barato”. Y pospuso su viaje. Pero en el tercer año, oyó decir a su asistente: “No puedo dejarte eso tan barato”. Y fue entonces cuando partió”.
Yo entendí sin más rodeos, salí de su cuarto sin saludarlo y dejé la puerta abierta. El viejo agarró un puño de granos de arroz que estaban en la mesa dentro de un plato y los arrojó detrás de mí.
Cuando sentí los granos de arroz en mi espalda supe que ya tenía permiso para enseñar.
2008-04-26 03:16
Leer este artículo “El ajedrez de los Topos”, produjo dentro de mí una profunda sensación de expansión y Paz. Este ajedrez de la vida, deberiamos tenerlo siempre presente al hacer cada jugada…tal vez poco a poco aprenderíamos a conocermos más.