Televisión hay, aún, por todas partes. Mientras avanza el siglo, e Internet la remplaza, queda como el electrodoméstico más importante. El que expulsa información sin parar. Información que debe ser sopesada. Esta columna tiene como finalidad y motor reflexionar sobre lo que se emite por televisión y considerar críticamente lo que en ella se ve y expone. Y lo hacía cada lunes. Sigue en elreceptor.com.
Tantos años ya de sentir predilección por el verano, la temporada de las series sencillas y los estrenos a escondidas, se justifican con años como este en el que hemos podido ver algunas de las mejores series del año.
Por si os lo estáis preguntando, esta vez toca repasar los estrenos de Julio y Agosto dejando los pilotos de la nueva temporada para cuando realmente vayan a emitirse. Con eso y con todo salen unas pocas series. Así que no lo retrasemos más:
Bad education
Agradable comedia británica sobre un profesor desastroso, estilo Bad teacher, y sus sufridos y sufribles pupilos. Quizá el joven protagonista ocupe demasiado espacio, le vendría bien respirar en el resto de secundarios pero, en fin, por lo menos aburre.
Bad sugar
Uno de los pilotos de los que voy a hablar porque surge dentro del programa de Channel 4 de repaso cómico en el que hablaban de su pasado y presentaban algunas de sus ideas para el futuro. Dentro de esos pilotos posibles este es el que más me gustaría ver. Parodia de los culebrones con una familia inglesa de clase alta y muchos problemas empezando desde el momento en que una extraña se une a la familia y apoyándose en tres grandes actrices cómicas —y también un gran reparto masculino, no vayamos a minimizarles— construyen una enorme farsa. Es decir; Olivia Colman, que lo mismo sale enormísima en la segunda temporada de Accussed —una nueva historia que incluye a Sean Bean como el travesti más improbable del mundo— que hace aquí de muchacha inocente e infantil, Julia Davis, disfrutando una vez más haciendo de mala como la hermana tiránica, y Sharon Horgan, llegada directamente desde la primera temporada de Dead boss, para hacer aquí de la esposa-con-un-plan que demuestra estar en el mismo nivel de locura que su nueva familia. Me parecería una lástima que esta serie se limitara a un único especial porque precisamente la acumulación de vueltas de tuerca es lo que hace grande este tipo de series.
Bikini barbershop
Ah, parece que era la semana pasada cuando hablaba de Realities Infames y ya tengo otro para la lista. Veréis, Jeff Wulkan es todo un EMPRENDENDOR. Se le ha ocurrido una idea magnífica: Una peluquería atendida por chicas en bikini. Y ya que están en ello también pueden grabar sus discusiones, o cuando se van de fiesta a emborracharse y toquetearse y… ¿Qué podría salir mal con una premisa así?
Black Dynamite
Novedad de los chicos de Adult Swim inspirada en la película de mismo título, requiere cierto conocimientos de blaxploitation así como de cultura popular USAka de los sesenta y setentera, el estilo por su parte es bastante aceptable y tiene algún ramalazo de influencia de Lupin III aunque no el suficiente para justificar un visionado continuado.
Blackout
Un policía, el siempre estupendo Christopher Eccleston, despierta sin recordar nada de la noche anterior provocado por su alcoholismo, lo que no sería tan grave si no se hubiera cometido un asesinato mientras del que quizá sea responsable. Como son ingleses parte de los tres episodios los ocupan reflexionando sobre la psicología de los personajes y los cambios que llevan a alguien honrado e ilusionado a corromperse hasta este extremo. Así que bien.
The Bletchley Circle
Interesante serie de época ambientada en los años ’50 sobre una mujer que descubre un código oculto tras unos asesinatos y ante el nulo caso de las autoridades decide reunir a su grupo de compañeras de cuando trabajaba en la sección de códigos para la inteligencia militar y así resolver el caso a la vez que vemos la evolución que cada una de ellas ha tenido y su relación con sus tiempos, tras haber sido útiles gracias a su inteligencia y que el mundo haya vuelto a sus cauces. Un gran entretenimiento.
Bullet in the face
Otra de las enormidades que nos tenía reservado el verano. Creación de Alan Spencer, el hombre detrás de la grandísima Sledge Hammer que en ciertos aspectos funciona como antecedente de esta. Si en la primera serie se exageraban los rasgos violentos de Harry el sucio, Mike Hammer y toda la forma de hacer cine de acción en los ochenta, aquí tenemos un nuevo giro que lleva directamente a Sin city de forma muy obvia y a los policiacos violentos estilo Tarantino por otro. Con esos mimbres —y un extraordinario tratamiento de imagen— tenemos una pequeña maravilla con policías, gangsters y una ciudad hundida en el fango, todo ello orbitando alrededor de un criminal reconvertido a la fuerza interpretado por un desconocido Max Williams en un papel que debería asegurarle interpretar al Joker antes o después. A su alrededor una mezcla de ilustres desconocidos tan lejanos a una carrera en cine o televisión como el propio protagonista como Kate Kelton y muy especialmente Neil Napier, enormísimo como el compañero justo y honrado, a los que añadir a Jessica Steen y los actores de culto Eric Roberts y muy especialmente el cómico Eddie Izzard. Incluso sin la historia sobre las oscuras maniobras para emitir la serie ya se merecerían toda la atención que pudiéramos conseguirle. Una de las series del año.
The Burn
Jefrey Ross es un cómico experto en insult comedy, especializado en roasts sobre los que ha escrito un par de libros y por lo que es Roastmaster General del Fryars Club y uno de los nombres fijos cuando Comedy Central presenta los suyos. De manera que su programa no podía ser otra cosa que una revisión del concepto dedicándose a roastizar la actualidad. Lamentablemente el primer programa se nota realizado con muy poco dinero y aún lejos de estar afinado, lo que al compararlo con los programas de actualidad que ya tiene el canal —que a este paso va a parecer la MSNBCXD — se convierte en un decepcionante punto muerto intermedio. Otra vez será.
Citizen Khan
Estaría hablando del peor piloto de este año de no haber existido Work It a principios de año poniendo el nivel por los suelos. Aquí tenemos algo que podría haber salido de un armario en los años sesenta, con una trama que muestra a los inmigrantes pakistaníes con una forma de actuar digna de Los Ropers, porque su creador, Adil Ray, se ha ido a la creación de un personaje caricaturesco tan antiguo que parece inspirado por W. C. Fields. Y su puesta en escena no es mucho mejor. Casi que la representación de una cultura diferente —la propia de los implicados, todo sea dicho— que es lo que le ha valido la mayor parte de las críticas, es casi lo de menos.
Coma
Nueva versión de la novela de Robin Cook tras la película de Michael Crichton, la historia es, por tanto, sobradamente conocida, y el resultado… ahm… el resultado no vale demasiado la pena. Si no conoces la obra original y te apetece ver una producción bastante ramplona imagino que puede estar bien gracias al manejo del suspense que realizaba Cook en la obra original. Para lo demás… Un preparado para su emisión en las largas tardes de domingo. Y ya.
Copper
Le tenía muchas ganas yo a esta serie, están implicados profesionales muy valiosos como Tom Fontana, creador de OZ y parte creativa en Homicidio: Vida en las calles o St. Elsewhere, Barry Levinson o Christina Wayne, todos reunidos para la primera serie creada especialmente para BBC America… El resultado no es realmente malo, simplemente es muy convencional. Un policía de origen irlandés en Nueva York durante los últimos años de su Guerra Civil, investigando y tratando de hacer justicia en un mundo lleno de corrupción y sordidez. Habrá que esperar que mejore.
Dragons: Riders of Berk
Serie infantil inspirada en Cómo entrenar a tu dragón pero, como suele suceder en estos casos, más un exploit de la película que algo dotado con la gracia de la original.
Family time
Bounce TV, emisora de Atlanta para público afroamericano que está tratando de expandirse a nacional, ha creado con esta serie su primera incursión en la ficción. Y no. La idea de una familia de clase baja que gracias a la lotería puede pasar a ser clase media y mudarse al sur de California… Es difícil saber por qué nadie querría que su primera incursión en la ficción parezca un resto de aquellas comedias por y para negros de los años noventa, pero ahí estamos de nuevo, enfrentados a un innecesario anacronismo.
Gates
Espanto inglés sobre un colegio, sus profesores y los padres de los alumnos en el que todo el mundo subactúa los ratos que no está sobreactuando. A evitar.
Good cop
Otro de esos encantadores policíacos ingleses llenos de personajes torturados y cielos grises. UN policía se enfrenta al cabecilla de una banda callejera en lo que resulta una espantosa idea que termina con su compañero muerto. A partir de ahí la culpabilidad y los cadáveres se van acumulando en ambos bandos mientras nuestro héroe se pregunta si habrá alguna forma de terminar con la pesadilla en que se ha convertido su vida. De momento va muy bien.
House husbands
Lo que parecería la respuesta australiana a Mujeres desesperadas no estuviera tan desfasado todo. Sigue una de las tendencias del año pasado —y mucho me temo que este también— con padres que se ocupan de cuidar a sus hijos. Por fortuna resulta mucho mejor de lo que su premisa podría hacernos creer, quizá incluso logre hacerse interesante en cuanto pasen unos capítulos y puedan cogerle el pulso pero, me temo, es más un producto para el gran público que otra cosa, con una intenciones de combinar naturalismo y un punto intermedio de comedia y drama que hace temer un nuevo Parenthood.
Howzat! Kerry Packer’s War
Esta mini de dos capítulos es una cosa curiosa, una producción australiana sobre un tema que jamás creí que llegaría a ver: La historia de cómo el cricket dejó de ser un deporte amateur y logró popularizarse gracias a la intermediación de un tipo, el Kerry Packer del título, que decidió arreglar este deporte permitiendo que sus jugadores pudieran vivir de él y —ya en ello— asegurándose los derechos televisivos.
Hunderby
Lo primero que debería hacer aquí es decir lo mucho que me está gustando a mí. Lo segundo es explicar que es una serie un poco especial. Y por un poco quiero decir bastante. Julia Davis, el cerebro tras Nighty Night entre otras, es la responsable de dar rienda suelta —una vez más— a su gusto por la maldad humana y la crueldad, esta vez mediante una parodia de las series de época inglesas. Con un fondo cercano en cierto modo a Rebeca y un humor más soterrado, podemos llegar a sospechar que es simplemente una rareza. Pero, en verdad, una rareza muy interesante.
The Inbetweeners (USA)
Intento americano de reciclar la serie inglesa. Dado que la inglesa no me gustaba demasiado y que los americanos funcionan de esa manera que funcionan ellos podéis imaginar lo que ha salido.
The Last weekend
Más british noir, más. En este caso parecido a Mad dogs pero en un contexto más cerrado, dos parejas pasando una pequeñas vacaciones y desatando sus tormentas internas. Bien también.
Line of duty
A continuación cambiamos de tema con un… ah, no, espera, es otro british noir. Quizá el mejor del lote, a espera de ver cómo termina Good Cop. Un joven y ambicioso policía recibe un encargo especial, descubrir que hay de cierto tras las acusaciones de corrupción recibidas por el policía estrella del cuerpo.
Major Crimes
Cuando Kyra Sedgwick anunció que dejaba The Closer las encantadoras cabecitas del canal TNT decidieron que no se podía desperdiciar esa audiencia así que un cambio por aquí, otro por allá y… Ponen a un personaje secundario recurrente — La Capitana Sharon Raydor, interpretada por la enorme Mary McDowell— en su lugar y todos a seguir como antes, o casi.
Mangoes
Un extraño caso entre las series canadiense, una historia sobre un grupo de asiáticos compartiendo casa, cada uno con su familia y su historia. Con un estilo similar a las series orientales hibridado con los trucos y costumbres occidentales logrando una serie dramática realmente singular.
The Midnight Beast
Otro de los grandes estrenos no ya de la temporada, sino del año. Una comedia sobre un grupo de música —real e integrado por sus miembros reales— que tratan de abrirse camino. Con todas las singularidades inglesas. Es decir, el referente más claro es Flight of the Conchords y el mismo grupo se declara deudor de Lonely Island pero el ambiente que trasmiten es el de Skins. ¿Qué más podríamos pedir?
A mother’s son
Estamos otra vez con una serie inglesa… Aunque esta no sea exactamente lo que esperamos al hablar del british noir pues si bien el centro es un asesinato y maneja una notable cantidad de suspense estamos en los campos del drama psicológico, con un planteamiento que se encuentra más cercano a La cena de Koch. Una mujer descubre las pruebas que señalan que alguien de su familia, muy posiblemente su hijo, podría estar relacionado con un terremboroso asesinato. Imaginad lo que viene detrás.
Murder: Joint Enterprise
Aunque esté más cerca del telefilm que de la serie estamos ante una pieza notable de serie negra británica, una vuelta de tuerca a los clásicos conceptos de investigación criminal o narración que presenta uno de esos casos complejos que tanto les gustan. ¿Cómo podría dejarlo fuera?
Parade’s End
Empiezo a sospechar que sólo los ingleses han estrenado series este verano. Quizá por eso me ha parecido el nivel tan alto. En este caso estamos ante una adapación del novelón El final del desfile de Ford Madox Ford por parte de algunos sospechosos habituales, con Benedict Cumberbatch y Rebecca Hall como protagonistas y Tom Stoppard encargado de convertir el texto original en una serie. Imagino que a los amante de las adaptaciones de época esto les encantará.
Parents
Comedia inglesa bastante ramplona sobre una familia que se ve obligada a mudarse a casa de los padres de ella. El tipo de argumento que —aunque haya ido haciéndose habitual los últimos años— parece que este esta temporada se le ocurrió a todo el mundo.
Political Animals
Intento aceptable de serie política en la televisión americana. Con un trasunto de Hillary Clinton decidida a arreglar a su familia y presentarse a la presidencia mientras todo tipo de tramas palaciegas, románticas o humanas se suceden. Y con buenos actores. Podría haber sido mejor, sí, pero tampoco vayamos a quejarnos muy alto.
Puberty Blues
Esta, ahm… serie juvenil australiana, trata sobre dos amigas adolescentes que quieren ser más populares uniéndose a un grupo de surferos. Que debe ser algo que pasa mucho ahí. Las chicas, de clase baja, aprovechan que están a finales de los años setenta y todo es más… algo… En fin, adolescentes y sus divertidas historias…
Sinbad
Intento de serie de aventuras con exotismo y blablabla. Intento porque es bastante cochambrosa e indeterminada, qué le vamos a hacer, los británicos también tienen estas cosas a veces.
Stars Earn Stripes
Esto es un concurso-reality pero vamos a hablar de él pese a todo. Se ha vendido la idea de que es una glorificación del ejército mediante documental y que promueve la idea de que las guerras son buenas. Como ser es bastante tontería, pero tampoco es que la serie sea mucho mejor idea. Es la clásica glorificación, no una excepcional, y los concursantes son especialitos también, desde el actor Dean Cain a la diva de la WWE Eve Torres pasando por Todd Palin, el marido de Sarah. ¡ALÍSTATE! Perdón, ha sido un pronto tras ver el programa.
Sullivan and son
El descendiente de un irlandés y una koreana decide dejar su lucrativo trabajo como abogado para dedicarse al negocio familiar: Un bar. Lleno de gentes estereotípicas y chistes usados, tampoco muy buenos, útil para rellenar las tardes y poco más.
Thirteen Steps Down
Novela de Ruth Rendell adaptado a serie sobre un hombre con dos obsesiones, un asesino psicópata y una bella modelo. La evolución de su historia estará marcada por la exploración psicológica de los personajes por un lado y los crímenes con sordina por el otro.
A touch of Cloth
Terminamos por todo lo alto. Charlie Brooker es conocido ahora gracias a su Black mirror pero su labor como guionista de comedia es más larga y profunda, desde los tiempos de The 11 O’Clock Show, aquí lo usa para lo que podría definirse como un British Noir como Puedas. El espíritu de humor excesivo y acumulativo: juegos de palabras, carteles, gags visuales y todas las barrabasadas que se os ocurran usando como base todos los tópicos de ese policíaco británico lleno de profesionales sufridos y problemáticos. Si os gusta os encantará, si no… Bueno, podréis evitarla… Surely.
Como veis un par de meses más que estupendos. Lástima que vuelvan de las vacaciones también las nuevas series y, con ellas, los pilotos asesinos. No me hagáis hablaros de Elementary tan pronto, dejadme fingir que no lo he visto al menos un par de semanas más.
2012-09-10 13:22
Me iba a quejar de que no menta usted la que para mí ha sido la mejor serie del verano, y del año, Hit & Miss, pero me parecía tan raro que he buscado un poquillo por si acaso y ya he visto que andaba por ahí en un post anterior :)
2012-09-10 14:10
Sí, empezó en Mayo si mal no recuerdo y durante los primeros meses del año, los tranquilos —je—, he estado haciendo Pilotos Deathmatch una vez cada dos meses. La verdad es que quizá debería haber enlazado al principio los anteriores para que todos pudieran ir viendo el repaso continuo, veamos… Enero-Febrero , Marzo-Abril , Mayo-Junio y con esta Julio-Agosto llegamos hasta el mes 8. Los cuatro últimos meses sospecho que tendrán su propio PD si sigue la explosión de novedades como otros años.
Ah, gracias a ti he visto que esta vez olvidé poner enlaces a las webs de los programas, a ver si luego tengo un rato y lo actualizo.
Y sí, para mí Hit & Miss ha sido una series del año. Posiblemente la mejor de toda la primera mitad hasta la llegada de este verano del AMOR.
2012-09-20 13:08
Alístate, el ejército de la ciudadanía.
2012-09-25 04:09
Pues no he visto la del verano del amor, pero Hit & Miss deberían ponerla en prime time en 13tv. Eso es una familia.
Ese final. La gente se queja de que queda abierto. Lo cierra, vaya si se cierra. La mejor del año, por el momento.