Televisión hay, aún, por todas partes. Mientras avanza el siglo, e Internet la remplaza, queda como el electrodoméstico más importante. El que expulsa información sin parar. Información que debe ser sopesada. Esta columna tiene como finalidad y motor reflexionar sobre lo que se emite por televisión y considerar críticamente lo que en ella se ve y expone. Y lo hacía cada lunes. Sigue en elreceptor.com.
Esta es, posiblemente, mi semana más difícil. Si ya fue un trabajo complicado elegir entre las muchas opciones de UK y USA o cribar las producciones españolas, la ide central de esta semana de seleccionar 5 miniseries dentro del interminable saco catódico.
En parte por el desconocimiento propio de quien esto escribe —pues todo conocimiento tiene por fuerza los límites de la propia capacidad humana— de manera que se habrán quedado fuera indudablemente miniseriesde gran valía tanto de juestros vecinos como de as más alejadas latitudes. Tampoco entraba en mis planes realizar una selección de lo más obvio de manera que algunos clásicos, grandes e inmortales como Fanny & Alexander o Densha otoko han tenido que quedarse fuera.
Por darle una oportunidad a todos al final podría parecer que hemos dejado fuera a alguno, es lo malo de las selecciones. En cualquier caso vamos a visitar los continentes y ya daremos allí las explicaciones necesarias.
Return to Eden (1983, Network Ten)
Empezamos por Oceanía, por Australia. Quizá podría haber tirado por otro camino, por algo menos… habitual… pero, teniendo en cuenta que Phoenix —basado en el caso real de una bomba y que reformuló el policiaco australiano—, Changi —sobre un grupo de prisioneros de guerra— o Bodyline — Hugo Weaving protagonizando una miniserie sobre, en fin, cricket— quizá sea más sencillo empezar por algo más sencillo, más clásico, como esta historia en la que una mujer se casa con el hombre equivocado, casi es asesinada por su marido mediante el tradicional método de arrojarla a los cocodrilos —tradicional en Australia, claro— aunque ella sobrevive gracias a un heremita que le da una fortuna en joyas para que se haga la cirugía estética y regrese para planificar su venganza en una mezcla de los superculebrones americanos de finales de los setenta y principios de los ochenta como Dinastía con el clásico esquema de El conde de Montecristo. Su exito fue tan grande que provocó que se realizara una versión en serie regular, tan regular que sólo duró una temporada. Y, además, inspiró un par de films de Bollywood. Se ve que allí también es tradicional lo de los cocodrilos.
John Ross: An African Adventure (SABC, 1986)
Nos vamos a África. Como mi desconocimiento incluye para mi desdoro mucho de lo producido en el contiente negro me temo que tendrá que ser en Sudáfrica donde encontremos la mini a recomendar, y la verdad es que también aquí teníamos varias posibilidades. De hecho, esperaba que hubieran estrenado Here’s to good times pero como no parece el caso la duda se quedaba entre esta elección y Shaka Zulu del ’83 —miniserie que imagino más fácil de conocer por ser una gran obra sobre uno de los más grandes reyes zulus de la historia— y esta que nos ocupa. Si bien estamos ante una aventura más cercana a los temas tradicionales aventureros la singularidad de este John Ross se ve desde el principio, desde que sabe que su nombre real era Charles Rawden Maclean y que se enroló en un barco para ver mundo. Serán estas aventuras de Ross por África, su buena relación con los Zulú, sus actos heróicos y, en general, una imagen más agradable de un hombre que supo conciliar una visión europea con una relación no de enfrentamiento con los nativos africanos —tacatá— lo que centrará la mini.
La presencia de Anita (TV Globo, 2001)
¡América! Y con todo lo que hablamos de USA mejor nos vamos más abajo, hasta Brasil. Es cierto que elegir una miniserie en el mercado americano tiene el problema de la duración de las mismas, historias estupendas con un principio y un final más desarrollo central como Caballo viejo tenía 180 capítulos a sus espaldas. Pese a ello he podio encontrar esta mini que adapta la novela del ya olvidado en España Mario Donato que ya fue adaptada a película en 1951, cuatro años antes de la publicación de la obra que más claramente nos viene a la cabeza al hablar de esta mini: Lolita. Como en la obra de Nabokov en esta mini de 16 capítulos tenemos a una muchachuela que centrará las tramas debido a su erotismo, como gran diferencia tenemos que frente a la discutible ambigüedad de la otra esta chavalita de 18 años demuestra ser poco menos que pura perversidad desde el primer momento. Un matrimonio en crisis y un intento de revivirlo será lo que provoque que la auténtica sufriente del relato, Lucía Helena, vea como su marido, Fernando, y posteriormente el resto de su familia —su hijo y su hijastra— son arrastrados por el huracán. Una muchacha a la que se nos trata de explicar como corrompida o equivocada por la crianza que una hombre mayor le dio. El resultado, de cualquier manera, está cerca de las clásicas tramas melodramáticas y telenovelescas con una figura central que va liándose con casi cualquier hombre que se le cruce, aprovecha para explorar también la locura y la hipocresía —especialmente social— de manera que podríamos considerar esta mini como un resumen de todas las claves pasionales, la telenovela tórrida definitiva.
Floris (NTS, 1969)
Volvamos a Europa por un momento. Aquí vamos a dejar bien clara mi ignorancia televisiva y mi incapacidad para tomar una buena decisión. Tras repasar miniseries desde Francia —como Napoleon o Mystère— a Italia —de La Piovra a la que todos esperábais: Fantaghiro— así como la nueva favorita del público que es la danesa The Killing , he acabado decidiendo irme a lo fácil y —ya puestos— pedir que los lectores me recomienden más minis europeas. Minis, ¿eh?, que ya sé que hay series magníficas como la francesa Engrenages y que podemos discutir si películas como la alemana Das Boot pueden entrar en la categoría de miniseries según presentación.
En cualquier caso, nos vamos a lo fácil, a lo cómodo, que en este caso es Floris, una historia de capa y espada, con antihéroes y batallas, una narración que comparte ideas con Ivanhoe pero que es llevada más allá gracias al buen hacer de su director, Paul Verhoeven, y de su actor protagonista, Rutger Hauer. El éxito fue suficiente para lanzar las carreras de ambos, proporcionando a ambos un trampolín para su paso al cine. ¿Cómo no dedicar una parte de nuestro verano a algo así?
Proposal dai sakusen (Fuji TV, 2007)
Debo reconocer que la ficción asiática suele parecerme fascinante por la mezcla de medios limitados y capacidad imaginativa —incluso en policiacos como la japonesa Galileo—, su despliegue es notable y casi siempre la producción coreana —habitualmente del sur—, china o japonesa de turno jugará con ello. Es difícil escoger una miniserie porque son muchas las posibilidades y limitado mi conocimiento, escoger una japonesa no significa despreciar en absoluto al resto de ficción producida en Asia y, más aún, me parece el mercado en el que más sorpresas podremos encontrarnos los póximos años.
Todo lo cuál no deja de ser un gran circunloquio de excusa para llevarnos a esta serie, Proposal dai sakusen u Operation love, una historia que ejemplifica esa locura imaginativa y esos medios limitados. Ken Iwase y Rei Yoshida son amigos desde hace años, Ken está enamorado de ella pero nunca se lo ha dicho y ahora parece muy tarde porque ella está a punto de casarse con otro hombre. Tan apunto que ahí está Ken, con otros amigos del instituto, atendiendo a la boda de Rei. Sin embargo eso no es un problema cuando aparece un hada que concede a Ken la posibilidad de viajar en el tiempo y permitirle una segunda oportunidad para conquistarla. El problema es que cambiar la historia y declarar el amor verdadero son cosas complicadas de lograr así que tal vez haga falta más de un viaje en el tiempo para que todo llegue al final deseado.
Terminamos con esto el repaso a las miniseries, el próximo lunes habrá un enlace entre esta serie y la vuelta a los temas clásicos. Mientras tanto podéis dejarme otras recomendaciones para minis —es decir, quejaros de lo que me he dejado fuera— en los comentarios.
2011-08-22 12:46
Pues así a bote pronto dos de este año, Misterios de Lisboa, de (snif) Raul Ruiz y Carlos, de Oliver Assayas. Y también me ha venido a la cabeza The Kingdom, esa cosa locuelísima pero interesantísima de *Lars Von Trier.
2011-08-22 13:56
Oh, vaya, recuerdo perfectamente “Retorno a Edén”. Qué infancia he tenido, dios mío.
La de Verhoeven me tira: un excelente motivo para no verla.
2011-08-23 02:02
Muy buen artículo. Solo decir que hay un pequeño fallo en la traducción de Operation Love. En japones Kami es la manera en la que se refieren a los dioses. La traduccion de Hada no es muy adecuada, pero muchos fansubs usaron esa traduccion.
2011-08-23 14:09
Alberto ,
Fíjate que The Kingdom lo tuve en mente para las menciones. A mí no me gustó practicamente nada. Y Kingdom Hospital poco más. De hecho, lo más interesante de la serie es que antes de hacer la tercera parte y definitiva se murieran cinco miembros del reparto.
Las otras dos, bueno, quedan anotadas.
Efe ,
Es lógico recordar algo que incluye joyas preciosas y cocodrilos masticando gente. Lo otro ya es más accesorio.
Y lo de Verhoeven probablemente te gustara pero no sé yo si tendría suficientes hombres semidesnudos como para que la vieras entera.
yusaku-chan .
Efectivamente las traducciones tienen estos problemas, el asunto es que en algún sub lo traducción como Dios o como Dios de la Capilla —aquí hablo de memoria— en ves de como Hada , pero es obvio que se trata de un problema de traducción se eligiese el término que se eligiera. En cualquier caso, anotada queda la puntualización.