Ángel Arroyo y Oscar Calvo son integrantes del grupo de investigación AICU del departamento de Sistemas Inteligentes Aplicados en la UPM. Su investigación se centra en el estudio de modelos coevolutivos en los que el comportamiento inteligente global emerge a partir de interacciones entre las unidades autónomas constitutivas del entorno. Metaversos es una columna de opinión que se publica todos los 18 de cada mes con el objetivo de analizar las posibilidades tecnológicas y las implicaciones sociales de este tipo de entornos virtuales (un ejemplo actual es Second Life).
Jugando se aprende. Puede que no sea la única manera de aprender, pero seguramente es la mejor. Con esta idea en la cabeza un equipo de desarrolladores japoneses han tratado de unir la medicina, el juego y Second Life creando Virtual Medical Doctor
En esta instalación virtual, diseñada con buen gusto y sin esa temible tendencia a abigarrar los escenarios de objetos absurdos, podemos participar en las diferentes actividades que nos ofrecen. Creo que la palabra que mejor describe el tipo de juego que ofrece en analogía con el mundo real es “yincana”.
Podremos juguetear con un minisubmarino como los que salían en la película “Un viaje alucinante” para inyectar diferentes substancias o tomar muestras con el laser miniaturizado. Habrá que recuperar la información de los distintos órganos y su respuesta a distintos fármacos para intentar salvar a unos pacientes bastante simpáticos. Diaporamas gigantes nos enseñarán las situaciones que generan esas enfermedades.
Lo que no me queda muy claro es el “target” al que va dirigida esta instalación. En ocasiones parece un juego infantil, pero en otras se requiere de cierto dominio del idioma (inglés por supuesto) y de conceptos complejos. En resumen, creo que es un entretenimiento perfecto para una media hora de compañerismo paterno-filial, o filial mayor-filial menor, o cualquier otra forma de colaboración niño-adulto. Por un lado los niños suelen verse atraidos por algo que se parece tanto a “Código Lyoko” y los mayores descubrirán que “jugar a médicos” no es sólo lo que estaban pensando cuando leyeron el título de este artículo.
Aquí van algunas imágenes de la instalación